Mediante US$ 320 millones recaudados a través del mercado de bonos, US$ 105 millones a través de swaps y otras fuentes se creó un fondo de Financiación de Emergencia Pandémica (FEP).
El Banco Mundial lanzó un "bono pandémico" para apoyar un mecanismo de financiación de emergencia destinado a liberar dinero rápidamente para combatir una crisis sanitaria importante como, por ejemplo, el brote de Ebola de 2014.
Este bono de catástrofe, que se pagará en función de: el tamaño del brote, su tasa de crecimiento y el número de países afectados, es el primero de su tipo para las epidemias. Y debe significar que el dinero se desembolsará mucho más rápido que durante la crisis reciente del Ebola en África Occidental.
Michael Bennett, director de divisas y finanzas estructuradas del departamento de mercados de capital del Banco Mundial, dijo que si esta Financiación de Emergencia Pandémica (FEP) hubiera existido en 2014, unos US$ 100 millones podrían haberse movilizado ya en julio de aquel año.
En la realidad, el dinero no comenzó a fluir en esa escala hasta tres meses más tarde, momento en el que el número de muertes por Ebola se había multiplicado por diez.
"Al final, alrededor de 11.000 personas murieron en esa pandemia y se estima que el costo para los países más afectados -Guinea, Liberia y Sierre Leona- fue de unos US$ 2.800 millones", dijo Bennett.
El FEP ofrecerá cobertura a todos los países elegibles para financiamiento de la Agencia Internacional de Desarrollo (AID), el brazo del Banco Mundial dedicado a los países más pobres del mundo.
Y abarca los brotes de enfermedades infecciosas con mayor probabilidad de causar epidemias importantes, incluidas las cepas pandémicas de influenza; el coronavirus, incluido el SARS; los filovirus, que incluyen Ebola y Marburg; además de otros males como la fiebre del Congo, de Crimea, la fiebre del Valle del Rift y la fiebre de Lassa.
Bennett dijo que el FEP como un todo proporcionaría más de US$ 500 millones de cobertura contra pandemias durante los próximos cinco años. Esto incluye la transacción actual de $ 425 millones, que comprende $ 320 millones recaudados a través del mercado de bonos y $ 105 millones a través de transacciones de swaps.
La transacción fue sobresuscrita en un 200%, atrayendo el interés de inversionistas dedicados a los llamados bonds cat (Catastrophe Bonds), administradores de activos, fondos de pensiones y fondos que destinan sus ganancias acciones caritativas, dijo el Banco Mundial.
Para el bono pandémico, el Banco Mundial pagará a los tenedores de bonos un cupón que reproduce una prima de seguro más un margen de financiación, a cambio de un pago si el bono se activa.
"Si ocurre un evento desencadenante, en lugar de pagar el bono en su totalidad, parte o todo el principal se transfiere al fondo fiduciario del FEP", dijo Bennett. "Así que, esencialmente, los inversionistas están actuando como compañías de seguros".
Por su parte, en las transacciones de swaps, la contraparte de swaps paga si ocurre un evento de activación.
"El objetivo de ofrecer el riesgo en ambas formas es que los bonos y los swaps atraen a diferentes tipos de inversores, y por lo tanto... estamos creando el más amplio grupo de inversores posible para este riesgo", dijo Bennett. Eso ayudó a bajar los precios.
Una ventana de efectivo reabastecimiento disponible a partir de 2018 proporcionará fondos para enfermedades que pueden no cumplir con los criterios de activación del bono, mientras que los compromisos futuros de los donantes pueden ser utilizados para adquirir cobertura adicional del mercado.
Munich Re, que ayudó a desarrollar el componente de seguros del FEP en conjunto con Swiss Re y el modelo de riesgo de catástrofes AIR Worldwide, dijo que las pandemias se contaban entre los riesgos más probables sin cobertura.
El costo global anual de pandemias moderadamente severas a severas se estima en aproximadamente US$ 570.000 millones de dólares, o el 0,7% de los ingresos mundiales, dijo el Banco Mundial. Un seguro contra ellos realmente ahorrara vidas y dinero.