El centro de información canSAR, desarollado en el Instituto de Investigación del Cáncer de Londres, permitirá visualizar las estructuras de más de 110 mil moléculas.
Con el objetivo de que los investigadores tengan las herramientas para diseñar tratamientos para el cáncer de manera más efectiva, canSAR, la base de datos más grande de avances sobre el desarrollo de terapias, realizó cambios a su estructura para incorporar la tecnología 3D.
El centro de información, lanzado en 2011 por el Instituto de Investigación en Cáncer en Londres, es pionero en la utilización de big data -grandes volúmenes de información- para construir una imagen detallada del comportamiento de las moléculas humanas. Ahora, con la incorporación del 3D, permitirá observar en detalle las estructuras de las proteínas involucradas en el desarrollo del cáncer, así como el mapa de la red de comunicación que usa la enfermedad.
Según una publicación de la revista Nucleic Acid Research, canSAR ha recolectado miles de millones de mediciones expermientales para mapear los efectos de un millón de drogas y químicos en las proteínas humanas, y ha combinado esos datos con información genética y resultados de pruebas clínicas.
En su nueva versión, canSAR utiliza inteligencia artificial para identificar todos los rincones de la superficie de moléculas cancerígenas, para facilitar la identificación de las drogas que podrían ayudar a bloquearlas. Además, permite que los investigadores identifiquen las líneas de comunicación que podrían interceptarse en las células de un tumor, abriendo nuevas vías potenciales para el tratamiento del cáncer.
Hasta ahora, la base de datos tiene la estructura 3D de casi tres millones de cavidades en la superficie de 110 mil moléculas. La información está disponible para los más de 140 mil usuarios de 175 países, que acceden de manera gratuita a la información.