Los planes también fortalecen la floreciente presencia del sector tecnológico, dado que el coloso de viajes compartidos Didi Chuxing planea lanzarse en México a finales de año.
Dos firmas chinas de bicicletas compartidas, con mucho dinero para invertir, se preparan para instalarse en México, el país que han escogido para debutar en Latinoamérica ya que alberga a una de las metrópolis más grandes y congestionadas del mundo.
Ofo, una firma con sede en Pekín y que ha recaudado más de 1.300 millones en capital de riesgo, está preparando ofrecer su servicio en México, con miras en la capital del país, Guadalajara y Monterrey, dijo Taylor Bennett, el jefe de comunicaciones de la compañía en Norteamérica.
Pero la firma, que cuenta con el gigante de comercio electrónico chino Alibaba como inversor, aún no ha establecido un cronograma para el lanzamiento, agregó Bennett.
Su principal rival, Mobike, que ha recaudado más de mil millones de dólares, también tiene su mirada puesta en México y está en conversaciones para llevar sus bicicletas de alquiler a una delegación de Ciudad de México, con un lanzamiento en febrero, según una persona con conocimiento del tema.
Un portavoz de Mobike se negó a confirmar los planes de la empresa, pero dijo que pasa tiempo trabajando con el gobierno local antes de ingresar a nuevos mercados.
Con su incursión en Ciudad de México, las compañías chinas de bicicletas compartidas competirán en un mercado que ya alberga ECOBICI, uno de los mayores programas públicos de bicicletas compartidas en América del Norte. En la capital mexicana habitan casi nueve millones de personas, con más de 21 millones en su área metropolitana.
La secretaria de Mobilidad de la capital mexicana declinó comentar sobre el tema, así como ECOBICI.
Los planes de las empresas de bicicletas de alquiler también fortalecen la floreciente presencia del sector tecnológico chino en México. Didi Chuxing, el coloso chino de viajes compartidos, planea lanzarse en el país a finales de año.
Ciudad de México, con sus calles atestadas de tráfico y mala calidad del aire, ha resultado ser un objetivo popular para las compañías tecnológicas que buscan redefinir el transporte. Uber Technologies Inc eligió Ciudad de México para su primera incursión en América Latina, y la metrópolis sigue siendo su tercer mercado más grande del mundo.
Ofo también está preparando ofrecer su servicio de alquiler por hora en Canadá, con Toronto como su mejor opción.
“Nuestro enfoque es realmente colaborativo, y lo que tratamos de hacer es construir desde cero el programa de bicicletas compartidas que funciona para las ciudades”, dijo Bennett. “Ahí es donde estamos ahora con México”.
Las firmas que popularizaron sus servicios en China están tratando de evitar los problemas de sobre oferta que surgieron allí. En noviembre, Bluegogo, la tercera compañía de bicicletas compartidas más grande del país, dijo que estaba cerrando, y el director ejecutivo de la empresa escribió en una carta pública que el mercado se había convertido en una “burbuja”.
A medida que llegan las empresas de bicicletas compartidas, los defensores de la movilidad en México instan a una regulación bien pensada para el sector, donde las normas sean uniformes en toda la ciudad y respeten los derechos de los peatones, dijo Ivan De la Lanza, que gestiona proyectos de peatones y bicicletas en el grupo de estudios World Resources Institute.
A pesar de la popularidad de ECOBICI, las compañías privadas de bicicletas compartidas como Ofo y Mobike tienden a complementar los programas gubernamentales, en lugar de competir con ellos, dijo Paul DeMaio, director de MetroBike, una consultora de bicicletas compartidas.