Todo el proyecto hidroeléctrico, que implica tres fases más, costará en total US$549 millones de dólares y concluirá en cuatro años.
El Gobierno de Bolivia contrató este lunes a la empresa china Sinohydro para construir la primera fase de la planta de la hidroeléctrica Ivirizu en Cochabamba (centro) por unos US$172 millones, los que serán financiados por el Estado boliviano.
El presidente boliviano, Evo Morales, que participó en el acto de firma, detalló que el presupuesto para esa primera fase era de US$190 millones, pero que la corporación asiática se adjudicó la obra por US$172 millones, es decir US$18 millones menos.
Algo similar pasó en la segunda fase, que ejecutará la misma firma china, cuyo presupuesto era de US$105 millones de dólares pero que al Estado boliviano finalmente le costará US$96 millones.
Este proyecto contará con dos centrales de generación de electricidad con una potencia global de 290 megavatios, detalló el ministro de Energía de Bolivia, Rafael Alarcón.
El contrato firmado este lunes corresponde a la represa y las vías conexas y en una segunda fase se contratará en octubre a la misma empresa para la construcción de túneles y las vías de acceso.
Todo el proyecto hidroeléctrico, que implica tres fases más, costará en total US$549 millones de dólares y concluirá en cuatro años.
El Gobierno también firmó hoy otros dos contratos relacionados con el proyecto de Irivizu con la empresa Ingetec a cargo de la supervisión y con la estatal Ende Transmisión que trabajará en la línea de conexión y en la subestación de energía del complejo.
Resta adjudicar una fase de construcción de tres casas para las máquinas y equipamiento electromecánico para lo que se esperan propuestas hasta el próximo 13 de octubre.
Morales pidió a las empresas cumplir con los plazos establecidos y advirtió de que las compañías no pueden "hacer faltar tiempo y dinero" porque pueden ser sospechosas de "negociados".
El Gobierno anticipó que si hay incumplimiento de los plazos en los contratos se aplicarán multas y sanciones.
Morales agregó que si no se cumplen con los plazos prefiere ejecutar los avales bancarios de las empresas en lugar de estar "en los negociados" con las compañías sobre las obras.
Los contratos serán financiados con recursos del Banco Central de Bolivia (BCB).