El conflicto detonó la pasada semana cuando decenas de pacientes del área de Oncología de la aseguradora se declararon en emergencia por la interrupción en el servicio que trata el cáncer y por la falta de camas para atender a los enfermos.
Llanto, dolor y desesperación han marcado los 13 largos días que los pacientes con cáncer de la Caja Nacional de Salud (CNS) sopesan por la cancelación de las radioterapias debido a una falla en el único y vetusto equipo que presta ese servicio. La entidad aseguradora ya alista la compra de servicios de un privado.
El conflicto detonó la pasada semana cuando decenas de pacientes del área de Oncología se declararon en emergencia por esa contingencia y por la falta de camas para atender a los enfermos porque, según uno de los cinco representantes de los afectados, Óscar Dávila, alcanza a más de un centenar.
Similares deficiencias han sucedido en el público Hospital de Clínicas que depende de la Gobernación, que paralizó su servicio de radioterapia y otros vinculados por más de un mes debido a la falla del equipo y la falta de personal.
Pero el caso de la CNS no es un hecho aislado. "La máquina de cobaltoterapia hace más de dos semanas no está en funcionamiento (...) tratándose de una enfermedad con bastante riesgo nos sentimos muy angustiados", se lee en una misiva enviada por los afectados al gerente regional de la CNS de La Paz, Williams de la Barra, quien admitió que el equipo "ya ha cumplido su ciclo".
"Prácticamente el equipo de radioterapia ya ha cumplido su ciclo, en relación a la nueva tecnología es muy complejo inclusive su misma reparación. El equipo en sí no está en desuso porque todavía está funcionando, pero por un problema que tiene a nivel de la camilla de tantos años de uso es muy difícil repararlo", señaló en una entrevista con La Razón Digital.
Funcionarios de la aseguradora que prefirieron guardar su identidad en reserva dan cuenta que data de unos 35 años si no es más. Es tan antiguo que los repuestos y el mismo aparato han sido "descontinuados", es decir que ya no se lo fabrica.
Se han elaborado varios informes sobre a ese respecto para sustentar la compra de uno nuevo y con mejor tecnología, pero la burocracia fue implacable. "Yo no puedo hacer nada, ya se han mandado los informes", dijo un galeno.
Cada tratamiento está valuado en unos US$ 5.000 y ya se calcula que en algunos casos los costos por paciente superarán los US$ 15.000.
Ante la contingencia, la CNS alista la compra de servicios de dos centros de salud privados que se hará en los próximos días. A juicio de De la Barra, esto demorará entre 10 a 15 días.
"Hemos conversado con dos centros privados que hay en La Paz y ya estamos viendo la gran cantidad de pacientes que se pueden beneficiar con esto y (los centros) nos puedan colaborar con los costos también, tenemos la obligación de cubrir todo este proceso", sostuvo.
Cada tratamiento está valuado en unos US$ 5.000 y ya se calcula que en algunos casos los costos por paciente superarán los US$ 15.000. El procedimiento ya no será con una máquina de cobalto sino con un acelerador lineal como es habitual en la actualidad.
"Un poco de paciencia a los asegurados, sé que es una patología muy sensible y en muchos pacientes uno tiene que actuar en forma rápida, pero esto es un imprevisto y obviamente tenemos que cambiar de tecnología. Lo estamos haciendo lo más rápido posible y será en una semana y media a dos semanas", destacó De la Barra.
"Nos hemos reunido, les hemos explicado, con ellos (los pacientes) nos hemos dirigido a El Alto y a la zona Sur. Han visto que nos estamos moviendo y haciendo la parte administrativa que tarde un poquito, pero tenemos que hacer las cosas bien desde el principio para no tener problemas", dijo.
La compra de esos servicios se extenderá a dos años; por eso el plan de contingencia que se labora hace varios meses atrás, y que a decir del titular de la CNS de La Paz se está "acelerando", tiene que ver con la compra de un acelerador lineal propio.
"Esto lo vamos a gestionar a través del directorio y de la Gerencia Nacional para que ellos nos autoricen la compra" dijo.
Pero esas no son todas las carencias. Se suma la falta de camas para las quimioterapias y las cirugías que es recurrente, más cuando hay pocas en el Hospital Materno Infantil donde se "aloja" a esa especialidad en el piso 7.
La semana pasada, una mujer relató que su papá ya no resiste más los efectos del mal, pero no hay camas para varones y otra lloraba porque a su madre le detectaron cáncer en la matriz, pero por la prolongada espera éste se propagó a la vejiga y a los intestinos.
Para paliar esa deficiencia uno de los proyectos que tiene la CNS de La Paz es la construcción de un moderno oncológico que será parte del complejo hospitalario que se proyecta en la zona Sur de La Paz, cuyo " diseño en un par de semanas vamos a presentar al Directorio", desveló De la Barra.
El moderno edificio se prevé construir en dos años y justo ahí se emplazará el acelerador lineal y otros aparatos que son parte de equipamiento.
"Estamos haciendo lo que no han hecho en 50 años porque nuestra misión es proteger a toda la población asegurada" destacó el funcionario, mientras los pacientes apuestan a esa muestra de voluntad para encontrar solución a su demanda.