Canciller japonés fue recibido por el canciller y el presidente Bolsonaro, tras sus visitas oficiales a México y Argentina. Se firmaron acuerdos en minería, agricultura y medio ambiente.
Bastante provechosa ha resultado la gira latinoamericana del ministro de Relaciones Exteriores de Japón, Toshimitsu Motegi. Mientras tokio tiene su segundo ierre, para evitar la propagación de contagios por coronavirus, el canciller ha cosechado importantes avances para el país con sus socios americanos.
Tras su paso por México y Argentina, Motegi llego el viernes a Brasil donde fue recibido por el presidente, Jair Bolsonaro, acompañado del canciller Ernesto Araújo.
El mandatario brasileño destacó en sus redes sociales que en el encuentro, que tuvo lugar en el Palacio de Planalto, en Brasilia, fue invitado por el visitante a la inauguración de los Juegos Olímpicos de Tokio, que se realizará el próximo 23 de julio.
Durante su primer año en el cargo, en octubre de 2019, Bolsonaro estuvo en Japón en una visita oficial, por lo que su eventual presencia en la inauguración de los Juegos Olímpicos sería su segunda visita al país asiático, recordó la agencia Xinhua.
El evento deportivo, previsto inicialmente para mediados del año pasado, fue pospuesto debido a la pandemia del nuevo coronavirus.
Pero hubo aspectos bastante mas profitables que solamente el intercambio protocolar y la invitación a unos JJOO que aun se ponen en duda.
La agencia EFE reportó que ambos gobierno firmaron un acuerdo de cooperación para la explotación de metales raros, entre ellos grafeno y niobio, este último aparentemente bastante abundante, ya que se dice que brasil es el país que posee las mayores reservas mundiales.
Araújo admitió que el Gobierno brasileño está interesado en acuerdos y medidas que puedan atraer inversiones de Japón a Brasil en áreas como la agricultura, minería, industria y tecnología digital.
"Vamos a profundizar el diálogo sobre cómo encontrar la mejor manera de crear una verdadera asociación comercial y de inversiones entre Brasil y Japón", afirmó el ministro brasileño de Relaciones Exteriores en una breve declaración a la prensa citada por la agencia EFE.
INFRAESTRUCTURA Y LOGISTICA
En su sitio web, la cancillería brasileña resalta que Japón es el sexto inversionista extranjero más grande en Brasil, con un stock de inversión de alrededor de US $ 25 mil millones.
De ahí que el Ministro Motegi conoció las oportunidades que presentan hoy para las inversiones japonesas en proyectos de infraestructura y logística brasileños.
El la cumbre, los cancilleres también acordaron profundizar la cooperación bilateral en las áreas de ciencia, tecnología e innovación y medio ambiente, entre otras, incluso a la luz de los acuerdos firmados durante la visita. Acordaron ampliar la coordinación en foros multilaterales, como la ONU.
En concreto, el ministerio de RREE detalló que se firmaron 4 actos internacionales: Memorando de Cooperación en el Campo de Tecnologías Relacionadas a la Producción y Uso de Niobio y Grafeno, Memorando de Cooperación de Tomé-Açu entre el Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Federativa de Brasil y el Ministerio de Negocios Extranjeros de Japón sobre Uso Sostenible de la Biodiversidad en la Amazonía, Ajuste Complementario por Intercambio de Notas para el Proyecto de Desarrollo de Sensores y Plataforma de Agricultura de Precisión en Apoyo a la Agricultura Brasileña Sostenible y Ajuste Complementario para el Intercambio de Notas para un Proyecto de Mejora del Control Deforestación ilegal mediante tecnologías avanzadas SAR e IA en la Amazonía brasileña.
El ministro japonés, por su parte, afirmó que las empresas niponas están interesadas en elevar sus inversiones en Brasil, pero aclaró que ese flujo dependerá de la aprobación de las reformas económicas propuestas por el Gobierno del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, para mejorar el ambiente de los negocios en el país y ofrecer garantías a los inversores.
El interés de las empresas japonesas en explotar metales como niobio, grafeno y litio en Brasil ya había sido abordado en una visita que Bolsonaro hizo a Tokio en 2019, fecha desde la cual viene siendo discutido el acuerdo, resaltó agencia EFE.
Las negociaciones derivaron en el Memorando de Cooperación en el Campo de Tecnologías Relacionadas a la Producción y al Uso del Niobio y el Grafeno, un acuerdo que explora la cooperación en la cadena de valor de los minerales raros.
"Es un acuerdo fundamental porque Japón es un país que tiene alta tecnología en el área", destacó el secretario ejecutivo de Ciencia y Tecnología de la cancillería brasileña, Leonidas Medeiros.
Brasil responde por cerca del 90 % de las reservas mundiales y del 86 % de la producción del niobio, mineral que, por ser dúctil, se utiliza en aleaciones a alta temperatura para fabricar superconductores o para hacer el acero más fuerte y ligero, por lo que es altamente valorado por las industrias automotriz, aeroespacial, nuclear y de defensa.
La Compañía Brasileña de Metalurgia y Minería (CBMM), una empresa privada controlada por los principales accionistas del Itaú, mayor banco privado de Brasil, y que cuenta con socios japoneses y chinos, tiene los derechos para explotar una de las dos gigantescas minas de niobio descubiertas en Araxá, municipio responsable por el 80 % de la producción brasileña de este mineral.
Concretamente, en su cuenta de Twitter el canciller Araujo dijo: "Hoy firmamos 5 instrumentos en las áreas de biodiversidad, niobio y grafeno, combate a la deforestación, respuesta a desastres naturales y agricultura de precisión: ejemplos concretos del gran potencial de la relación - también enriquecida por la comunidad japonesa en Brasil y Brasil en Japón."
SOJITZ Y TOSHIBA YA INVIRTIERON
EFE destaca que entre los socios de CBMM se destaca un consorcio japonés-coreano liderado por la japonesa Sojitz y que en 2011 pagó US$1.950 millones por un 15 % de participación en la firma brasileña.
La misma CBMM ya tiene un contrato con Toshiba para desarrollar unas baterías de litio destinadas a electormovilidad que usan ánodos de óxidos de niobio y titanio.
En lo que se reiere al litio, si bie Brasil no es de las naciones donde estaria el triángolo de oro del litio, lo cierto es que el grupo nipón Mitsui ya está en el papis y con ganas de participar en electromovilidad.
Otra área de interés de las empresas japonesas en Brasil es la de tecnología digital y la posibilidad de que su tecnología pueda ser usada en la implantación de las redes de 5G de telefonía móvil en el mayor país latinoamericano, en el que aún hay dudas sobre la conveniencia de la participación de las empresas chinas.
La inversión japonesa en esta área "favorece nuestro modelo de sociedad democrática, con libertad y seguridad", afirmó Araújo, quien en Twitter además hizo referencias a la declaracion universal de derechos humanos y criticas al comunismo, en una no tan velada alusión a los hechos del Capitolio esta semana.