Robert Bruner es decano de la Darden School of Business de la Universidad de Virginia en EE.UU., además de uno de los líderes académicos con más resonancia por su visión sobre liderazgo, y el rol que las escuelas de negocio deben asumir en la preparación los futuros líderes.
Robert Bruner comenzó su trabajo como decano de la Darden School of Business, de la Universidad de Virginia en EE.UU., en Agosto de 2005, donde además continúa enseñando como profesor de Business Administration. Bruner es reconocido por su aporte a la enseñanza del emprendimiento y el management de innovación, así como por su visión comprometida con un tipo de liderazgo global. Es también uno de los decanos más activamente involucrados en las redes sociales, especialmente desde su cuenta de Twitter @Bob_Bruner y desde su deansblog.
En la Conferencia "Globalization and Leadership Development in an Integrated World”, auspiciada por la IESE Business School en 2011, usted declaraba que “las escuelas se enfocan al “management training” cuando deberían trabajar sobre el “management development”, considerando el desarrollo de competencias en un aprendizaje participativo”. ¿Qué quiso decir con esto? ¿Cómo Darden trabaja en pos de esa visión?
La diferencia entre “training” y “development” puede ser descrita de esta manera: el training sirve para construir un tipo de conocimiento y habilidades básicas. Por lo regular funciona de modo unidireccional, del profesor a los estudiantes. La información que brinda es estándar, puede ser reflejada a través de una conferencia o tutoriales encontrados en internet. Los estudiantes se entrenan para alcanzar cierto nivel en habilidades como pueden ser manejar la contabilidad o llenar una hoja de balance, que son saberes más mecánicos.
Si se tiene en cuenta las características de una educación de alta calidad, debe contener tres elementos: conocimiento, habilidades y atributos del carácter.
El conocimiento que tiene que ver con saber las denominaciones, fechas y mecánicas. Las habilidades tienen que ver con saber cómo vender, comunicar o negociar. Estas habilidades se aprenden mucho mejor con un tipo de enseñanza presencial, cara a cara, mucho mejor que en modalidad a distancia o por internet.
El tercer elemento que debe contener es el desarrollo del carácter. Esto incluye adquirir atributos y valores tales como inteligencia emocional, conciencia social, empatía, integridad, ética laboral… Una variedad de virtudes que una buena educación debe ayudar a construir. Creo que son virtudes que necesitan ser desarrolladas presencialmente.
Entonces, “management training” resulta enfocado principalmente en el conocimiento, en tanto el “management development” persigue el desarrollo de los tres elementos, conocimiento, habilidades y atributos de carácter.
Mi crítica no estaba dirigida a la IESE Business School, de hecho he enseñado en esta institución y la tengo en alta estima. Mi crítica consistía en que la mayoría de las escuelas de negocio se dan por vencidas, se contentan con enfocarse sobre el “training” cuando deberían concentrar esfuerzos en el desarrollo de conocimientos, habilidades y atributos de carácter. Pero esto es un desafío, e implica un costo alto.
Se trata de un costo alto en tiempo, talento y recursos financieros. Hay alrededor de 13 mil instituciones en el mundo que otorgan diplomas de negocio de algún tipo. Muchas de esas escuelas están orientadas al “training”. Es comprensible, de tener en cuenta que muchas de estas se encuentran en economías en desarrollo, sin los suficientes recursos sobre los cuales apoyarse. Pero la realidad es que para crear los líderes de mañana debemos enfocarnos a construir las competencias relacionadas con los conocimientos, habilidades y atributos.
En Darden el enfoque abarca los tres aspectos. La escuela es conocida por su programa MBA, full time, de 21 meses. Es un programa demandante, cuya enseñanza es cara a cara. Enseñamos en base al estudio de caso, que es un tipo de enseñanza activa, que permite un alto nivel de participación. Los estudiantes que llegan a Darden dicen que es un tipo de experiencia distinta a cualquier otra que tuvieron antes.
La escuela pone énfasis en el “management development”, pero también en el desarrollo de cualidades de liderazgo a través del estudio de caso, juegos, simulaciones, seminarios. Por eso digo que puede ser un tipo de educación costosa.
Darden se conoce por su énfasis en el desarrollo del liderazgo. ¿Cómo se preparan en Darden los futuros líderes de negocios para que sepan lidiar con las economías emergentes donde las culturas son tan distintas?
Tenemos un compromiso muy profundo con mantener la diversidad en la escuela. Y la ponemos en práctica de todas las maneras posibles, no sólo en lo referente a diversidad genérica o racial sino geográfica y étnica. Alrededor de un tercio de los estudiantes provienen de otros países. Dado el tamaño de las poblaciones mundiales, recibimos muchos estudiantes de economías emergentes.
Tenemos el club de estudiantes internacionales de negocios, que probablemente sea el más amplio en la escuela. Es muy popular y auspicia varios eventos culturales. Además, tenemos una facultad diversa, cuyos profesores vienen de casi todos los continentes. Varios de ellos son hispanoparlantes que conocen de las realidades de los estudiantes chilenos, españoles, y demás.
La enseñanza se imparte en inglés, que es el lenguaje internacional de los negocios hoy, pero respetamos la diversidad cultural. Enseñamos y escribimos sobre estudios de caso –alrededor de 250 casos al año- de los cuales muchos tratan sobre situaciones fuera de EE.UU., en economías emergentes, los cuales suelen presentar algunos de los aspectos más interesantes sobre management.
También ofrecemos el programa Global Executive MBA, que incluye visitas a tres de las economías en desarrollo más grandes –India, China y Brasil- además de Europa y EE.UU. Es un programa para profesionales en un punto avanzado de su carrera que deciden cursar un MBA pero no desean dejar sus trabajos. Este programa brinda una instrucción intensiva a través de estancias de dos semanas, cada vez en un país distinto. En medio, la instrucción es online. La aceptación de los estudiantes de este programa es muy alta. Se muestran muy entusiasmados acerca de la experiencia intercultural y el acercamiento que tienen a estas economías.
Creo que no es posible formar al líder del futuro sin facilitarle una mirada a la sociedad y una conciencia social sobre los asuntos que enfrentan las economías en desarrollo, desafíos que deben ser solucionados.
Las redes sociales son asumidas como herramientas de auto presentación, marketing, activismo social y difusión de información, ¿pero es posible usar las redes sociales con fines de liderazgo?
El desafío de cada líder es ayudar a los seguidores a entender cuáles son los retos y las oportunidades que enfrenta la empresa. Y ayudarles a entender cuáles son sus ideas y su visión.
Un líder gana su autoridad no porque le sea conferida por el board que lo designó CEO de la compañía. Al contrario, el líder fomenta su autoridad en base a la confianza que construye dentro de la organización. Y las redes sociales contribuyen a generar esa conciencia y empatía hacia el líder, que al final deviene en confianza.
Esto puede sonar como un contrasentido para algunos líderes, quienes creen que deben conducirse de manera distante para ganar en autoridad y comandar el sentimiento de sus colaboradores. Pero hay una gran cantidad de investigación reciente que sugiere lo contrario. Los colaboradores hoy, especialmente en el entorno de las redes sociales, esperan aprender más de cómo piensa el líder. Las redes sociales ayudan mucho en ese sentido.
De hecho, el término auto presentación es muy apropiado, pero se trata de algo más que de expresar datos acerca del líder. Se trata de expresar valores, las metas, y un punto de vista crítico respecto a varias cosas.
Se reconoce cuando un blog, o una cuenta de Twitter, son administrados por el departamento de RR.PP. de una compañía, porque se reduce simplemente a presentar hechos, eventos, en contraposición a las que son producidas por el líder que se sienten mucho más auténticas.
Las cuentas administradas por los departamentos de RR.PP. por lo general publican contenido del tipo “el líder asistió a una cena con oficiales del gobierno”, o “el líder entregó un premio”, o “dio un discurso hoy”, todo eso es a lo sumo modestamente interesante. Además, los departamentos tienden a reducirse a presentar sólo buenas noticias, el tipo de información que hace a la gente sentir bien. Pero el blog auténtico, los tweets auténticos, son aquellos que abordan el dilema que enfrenta el líder, y cómo hará para superarlo. Esos son los valores que han probado ser de importancia a la hora de construir las culturas dentro de las compañías. En esto, las redes sociales también pueden ser muy útiles.
Los alumni-embajadores es una de las estrategias de Darden para atraer candidatos de todo el mundo. ¿Qué otras estrategias se desarrollan desde la escuela?
Tratamos muy activamente de involucrar a los egresados de nuestra escuela en el proceso de reclutamiento de nuevos postulantes. Nos hemos dado cuenta de que los interesados en un programa MBA, mientras están buscando a qué institución postular, muestran el mayor interés por lo que dicen los graduados de sus experiencias. Casi llega a interesarles más el testimonio de ellos que lo que pueden informar los representantes oficiales de la escuela, sean los miembros de la facultad, del equipo de admisión o yo mismo como decano.
Son los egresados los que terminan siendo más influyentes.
Por otra parte, es de tener en cuenta que Darden es diferente de muchas escuelas de negocio. Enseñamos según el método de discusión. Y todo es impartido en Inglés. Es un programa demandante, que no es para todo el mundo. Por eso es tan importante que los estudiantes interesados busquen saber todo lo posible sobre cualquiera de las escuelas de negocio a las cuales están considerando postular. Los rankings, las guías de experto, y la información disponible en internet deben ser sólo puntos de partida.
Algunas fuentes indican un número decreciente de postulaciones a los programas MBA, indicando que los altos costos de los mismos puede ser una razón. ¿Es el caso de Darden?
De hecho, estamos recibiendo un número mayor de postulaciones. Es el tercer año consecutivo que en que el número de postulaciones recibidas es mayor que el anterior.
Creo que el declive en las candidaturas es representativo en las economías desarrolladas, dígase EE.UU., Europa y Japón. Si se observan las estadísticas, en EE.UU. el número viene decreciendo desde 2002, una disminución lenta, casi imperceptible, pero disminución al fin.
En Japón el decrecimiento ha sido mucho más agudo, lo mismo que en Europa. Creo que en los tres casos, es un reflejo de la crisis financiera global y de la recesión. Mientras, las postulaciones procedentes de otros países han aumentado a nivel mundial. En Darden, tenemos la experiencia de recibir un volumen saludable de postulaciones de los EE.UU. Pero también recibimos una gran cantidad de postulaciones del exterior.
Generalmente mi comentario sobre el declive se refiere a que se debe a la recesión, a la madurez de las economías desarrolladas y a que la gente joven puede dudar acerca de la disponibilidad de trabajos que pueden encontrar una vez se gradúen del MBA.
Con todo, en realidad la economía, y los números indicativos de empleo están creciendo en EE.UU. Da la impresión de que las restricciones que existen para los extranjeros se van a relajar, aunque es algo todavía en discusión en el congreso. Pero se percibe un mejor ánimo, que viene acompañado de un crecimiento económico mayor, más rápido, y más interés en la expansión de los negocios, todo lo cual al final resultará en un mercado laboral de más posibilidades.
Soy optimista. Creo que existe una necesidad virtualmente infinita en cuanto al desarrollo del management en el mundo actual. No hemos tocado fondo todavía, no hemos encontrado el límite de la demanda, y eso es crucial. En economías como las de Chile, Brasil, India o China hay enorme necesidad por aprender e implementar las mejores prácticas del management. Soy optimista acerca del futuro de la educación de negocios.