Autoridades indicaron que el mapa de Google Earth carecía de "verdad y realidad" y pidió su inmediata retirada ya que no había sido internacionalmente reconocido.

Phnom Penh. Camboya arremetió contra Google por lo que calificó como un mapa "radicalmente engañoso" de la disputada frontera con Tailandia, acusando al mayor buscador del mundo de ser "profesionalmente irresponsable".

Camboya, que está inmersa en una tensa polémica con Tailandia por la demarcación de la frontera, dijo que el mapa de Google Earth carecía de "verdad y realidad" y pidió su inmediata retirada ya que no había sido internacionalmente reconocido.

Camboya presentó su reclamación en una carta enviada un día antes de la primera visita a la región fronteriza de su primer ministro, Hun Sen, que probablemente aumente la tensión entre los dos enemigos históricos.

"(El mapa) no responde a la verdad ni a la realidad, y es profesionalmente irresponsable, si no pretencioso", dijo Svay Sitha, secretario de Estado del Consejo de Ministro de Camboya, en la carta que envío y a la que tuvo acceso Reuters el viernes.

"Por tanto, pedimos que retire el mapa ya difundido, muy malo y no reconocido internacionalmente y lo sustituya", agregó la carta.

Ambos países tienen una fuerte presencia militar a lo largo de la frontera, que en los últimos tres años ha sido escenario de enfrentamientos mortales.

En el centro de la disputa está el templo de Preah Vihear del siglo XI, propiedad que le fue concedida a Camboya en 1962 por un tribunal internacional.

Sin embargo, muchos tailandeses nunca han aceptado completamente la decisión y el templo ha sido utilizado por ambos países para avivar el fervor nacionalista.

Tailandia retiró el pasado año su promesa de apoyo a Camboya para incluir al templo de Preah Vihear en la lista de sitios considerados Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, argumentando que la jurisdicción del territorio que rodea el templo nunca se había resuelto.

Google está actualmente enfrascada en una polémica con China y el mes pasado dijo que iba a revisar sus operaciones comerciales en el país tras denunciar una serie de sofisticados ataques cibernéticos.