El senador Guido Girardi sostuvo una reunión con la ministra de Salud, Carmen Castillo y el superintendente de la cartera, Sebastián Pavlovic. Una de las medidas buscar fijar una tasa máxima de rentabilidad para estos procesos.
Cluster Salud. Tras conocerse un informe de la superintendencia de Salud de Chile donde aparecían diferencias importantes en los precios de los exámenes médicos en las clínicas, es que autoridades del país dieron a conocer algunas medidas que podrían implementarse para restringir esta diferencia.
El senador Guido Girardi, miembro de la Comisión de Salud del Senado, se reunió con la ministra de Salud, Carmen Castillo y el superintendente de Salud, Sebastián Pavlovic, para buscar una solución con algunas propuestas concretas.
Entre las ideas están el establecimiento de un costo referencial, una tasa máxima de rentabilidad y la creación de un observatorio de precios.
El senador Girardi indicó que la información revelada por la superintendencia de Salud "no debe servir sólo para indignarse sino que para buscar la forma de terminar con abusos inaceptables pues la salud no es un bien de consumo más y no se puede optar por otra alternativa pues la vida está de por medio”.
Además agregó que en este mercado “no existen precios de referencia y hay una asimetría total de información. Los pacientes no tienen como saber si lo que le cobran es aceptable o no”.
Según Girardi esta situación causa “una escalada inflacionaria y las Isapres cobran más por sus planes o entregan una menor cobertura. Y esto se agrava pues las clínicas cobran mucho más por un examen cuando la persona está hospitalizada –una suerte de rehén- que cuando lo hace de manera ambulatoria”. Por esto propuso fijar un precio de referencia para los usuarios y "contar con una banda de precios o tasa máxima de rentabilidad para los exámenes".
Trabajo conjunto
La ministra Castillo acogió de buena manera las propuestas del senador, afirmando que “este es el inicio de un trabajo donde analizaremos la investigación realizada y veremos cómo tener de manera permanente la disponibilidad de los precios reales”.
Además informó que ya se está trabajando junto al Instituto de Salud Pública (ISP) en un Observatorio de Precios para Medicamentos y que algo similar podría desarrollarse en torno a los exámenes.
El superintendente de Salud, Sebastián Pavlovic, expresó que la investigación que suscitó la polémica por la diferencia de precios en los exámenes clínicos, busca “aportar antecedentes para efecto de abrir desde la evidencia una discusión pública para mejorar la regulación y proteger los derechos de los usuarios en salud”.