Desde ayer los asegurados pueden elegir si permanecer o no en la isapre, luego de que fuera vendida al grupo americano Nexus Partner.

El primer día sin “corralito” de isapre Nueva Masvida en Chile se llevó a cabo bajo opiniones divididas: mientras algunos acusaron trabas para desafiliarse otros reportaron respeto a sus planes y buena atención.

Lo anterior, luego de que finalizara la prohibición de desafiliarse que pesó por más de dos meses contra los más de 500 mil beneficiarios de la ya extinta isapre Masvida. Tiempo en que se buscaba salvar a la institución de su crisis financiera.

Desde ayer martes los asegurados pueden elegir si permanecer o no en la isapre, luego de que fuera vendida al grupo americano Nexus Partner, quien prometió respetar las condiciones contractuales y los valores de los planes de los afiliados, al menos durante este año.

A pesar del fin de la prohibición, usuarios han denunciado demora y ambigüedad en la información que se entrega al querer renunciar a Nueva Masvida.

¿Permanecer o irse? ¿Existirá una fuga masiva?

El superintendente de Salud, Sebastián Pavlovic, hizo un llamado a los afiliados a Nueva Masvida a evaluar con calma un eventual cambio.

El superintendente de Salud, Sebastián Pavlovic, hizo un llamado a los afiliados a Nueva Masvida a evaluar con calma un eventual cambio.

“La recomendación que nosotros hacemos, más que a quedarse o a migrar, es a evaluar bien esta situación, a comparar. Que toda la información que se le entregue, los ofertones, las virtudes de las ofertas que reciben, las exijan por escrito, bien explicadas y no se expongan a engaños posteriores”, aconsejó.

La autoridad aseguró que en general el sistema ha funcionado de manera normal, pero si reconoció la existencia de inconvenientes, los cuales llamó a denunciar ante la entidad reguladora.

Respecto la posibilidad de una fuga masiva de afiliados, dijo que no les corresponde especular respecto de este tema, pero si llamó a recordar que la situación de la isapre no es la misma que hace meses y advirtió que “una eventualidad así podría complicar el funcionamiento de cualquier isapre, pero la responsabilidad es de la nueva administración”.

Por último, Pavlovic, advirtió que los contratos de desafiliación firmados en período de “corralito”, no tienen efecto y deberán hacerse de nuevo.

Hasta 40 mil millones de pesos (US$ 59,8 millones) se estima que perderá la nueva aseguradora en su primer año, principalmente por pérdida de afiliados.