La Dirección General de Aeronáutica Civil dijo que el aeropuerto de la capital funcionaba al 65% de su capacidad a cinco días del terremoto. Por ahora, centenares de turistas extranjeros están varados en Chile desde el sismo de magnitud 8,8 que devastó este sábado el centro y sur del país.
Santiago. El aeropuerto internacional de Santiago, semi paralizado tras el terremoto del fin de semana, demoraría dos o tres semanas en volver a operar a 100% de su capacidad, dijeron este jueves las autoridades.
La Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) dijo que el aeropuerto de la capital funcionaba al 65% de su capacidad a cinco días del terremoto.
"Según el pronóstico que nos dio el gerente general (del aeropuerto), en dos a tres semanas deberíamos estar al 100% de la capacidad", dijo a Reuters el secretario general de la DGAC, Pablo Ortega.
Más de 130 vuelos comerciales habían aterrizado o despegado al mediodía de este jueves en Santiago.
"El flujo de pasajeros está siendo servido en 65% más o menos del total de las operaciones normales", dijo Ortega.
Centenares de turistas extranjeros están varados en Chile desde el sismo de magnitud 8,8 que devastó este sábado el centro y sur del país, dejando al menos 800 muertos.
"Estaba bastante frustrado", dijo Bernhard Wilhelm, un contador alemán que hacía fila con esperanza de embarcar de regreso a casa.
El temblor, uno de los más violentos de los que se tenga memoria, derrumbó parte del techo de una terminal en Santiago, pero Ortega dijo que no ocasionó "daños estructurales".
Las autoridades tuvieron que montar improvisadas salas de embarque en tiendas de campaña junto a la pista.
Operarios reparaban el jueves el cielorraso de la terminal dañada y reponían lámparas destrozadas por el sismo.
Un terminal utilizado normalmente para vuelos domésticos fue habilitado para salidas y llegadas internacionales.
Ortega, de la DGAC, dijo que todas las líneas aéreas que vuelan a Santiago están programando sus vuelos.
La noticia levantó el ánimo de los turistas.
"Si lo comparas con la tragedia en el resto del país, esto es mínimo", dijo Maurino Alarcón, un músico de 27 años que aguarda desde el lunes para regresar a su casa en Holanda.
"Pero claro que cómodo no es", añadió.