El país adoptó en 2013 una ley de salud mental que requiere el consentimiento de los pacientes de enfermedades mentales para recibir tratamiento hospitalario.
La máxima fiscalía de China ha publicado un nuevo reglamento sobre el tratamiento médico obligatorio a los sospechosos con enfermedades mentales para evitar condenas erróneas y garantizar la imparcialidad y la justicia.
Con las nuevas reglas se pretende prevenir y rectificar los casos en los que los sospechosos intentan hacerse pasar por enfermos mentales con el fin de escapar de castigos penales y aquellos en los que personas inocentes son internadas por la fuerza, dijo la Fiscalía Popular Suprema (FPS) en un comunicado.
Para fortalecer la supervisión del uso del tratamiento médico obligatorio, los fiscales pueden reunirse con sospechosos con enfermedades mentales, interrogar a la policía que investiga los casos, a las personas que evalúan la salud mental, a los médicos, familiares y vecinos de los enfermos mentales, así como a las víctimas de cada caso, de acuerdo con las reglas.
En algunos casos, el uso incorrecto del tratamiento médico obligatorio fue corregido por fiscales después de escuchar a las víctimas, dijo la FPS.
Los fiscales deben dar sugerencias para rectificar el uso del tratamiento médico obligatorio si se determina que la agencia de acreditación no está calificada para emitir diagnósticos, o si se encuentran falsificaciones u otras violaciones en la evaluación médica.
China adoptó en 2013 una ley de salud mental que requiere el consentimiento de los pacientes de enfermedades mentales para recibir tratamiento hospitalario ante el número creciente de casos de personas ingresadas erróneamente.
La ley dice que los enfermos mentales, con la excepción de los graves o los susceptibles de lesionarse a sí mismos o a otros, deben recibir tratamiento como pacientes hospitalizados de forma puramente voluntaria.