Xinhua. China informó de sólo 40 casos de malaria adquiridos localmente en 2015, por debajo de alrededor de 4.300 en 2010, según la Comisión Nacional de Salud y Planificación Familiar.
En 2010, el país estableció el objetivo de eliminar todos los casos adquiridos localmente, excepto en algunas zonas de frontera en el suroeste de la provincia de Yunnan, para finales de 2015, y de curar la enfermedad por completo en 2020.
De acuerdo con una evaluación de mediano plazo publicada esta semana por la comisión, el progreso "va bien" ya que más del 96,4% de los condados de clase A (excepto algunos en Yunnan) y el 99,8% de los de clase-B no reportaron casos obtenidos localmente el año pasado.
China divide sus condados como unidades básicas de control de la malaria en cuatro clases en términos de gravedad. La clase-A es la de más alto riesgo.
"Nuestro país todavía se enfrenta a un alto riesgo de malaria de rebote, así como a una grave situación de los casos importados, y nuestros institutos de salud todavía tienen algunos puntos débiles en cuanto a la prevención y control", explicó el reporte, citando a un total de 25.612 casos de malaria en general, reportados entre 2010 y 2015.
A pesar de los avances en los casos adquiridos localmente, el informe indicó que 30 condados o ciudades reportaron casos importados en 2015, frente a sólo 22 en 2010.
El plan de 2016-2020 contra la malaria describe los próximos cinco años como la etapa crucial para la erradicación y la orientación de los casos importados, especialmente en las zonas fronterizas.