La labor de los investigadores se trató de un método llamado complementación con blastocistos, el cual ha producido resultados prometedores.
El órgano más solicitado para transplantes en el mundo es el riñón. Su importancia se debe éstos son los encargados de filtrar y desintoxicar el organismo. Por eso las listas de pacientes que esperan un transplante de este tipo, al menos en Colombia, supera los 5000 solicitantes. Un problema teniendo en cuenta que la demanda supera los donantes, de ahí que la ciencia haya empezado a cultivarlos.
Este método fue probado con éxito por investigadores del Instituto Nacional de Ciencias Fisiológicas de Japón, quienes desarrollaron riñones de ratón funcionales dentro de ratas con solo unas pocas células madre de donantes. El logro, que será publicado en el próximo número de 'Nature Communications', representa implicaciones significativas para el trasplante de órganos humanos.
La labor de los investigadores se trató de un método llamado complementación con blastocistos, el cual ha producido resultados prometedores. Los investigadores toman blastocistos, los grupos de células formados varios días después de la fertilización del óvulo, de animales mutantes a los que les faltan órganos específicos y les inyectan células madre de un donante normal, no necesariamente de la misma especie.
Entonces, las células madre se diferencian para formar todo el órgano faltante en el animal. El nuevo órgano conserva las características del donante original de células madre y, por lo tanto, potencialmente puede usarse en la terapia de trasplante. "Anteriormente, utilizamos la complementación con blastocistos para generar páncreas de ratas en ratones mutantes apancreáticos", explica el autor principal del nuevo estudio Teppei Goto.
Riñones estructuralmente intactos
"Por lo tanto, decidimos investigar si podría usarse este método para generar riñones funcionales, que tendrían una aplicación mucho mayor en la medicina regenerativa debido a la alta demanda de donantes", añade este experto. Los intentos iniciales de los investigadores de cultivar riñones de rata en ratones no tuvieron éxito, ya que las células madre de rata no se diferenciaron fácilmente en los dos tipos principales de células necesarias para la formación de riñón.
Sin embargo, cuando se intentó el escenario inverso, las células madre de ratón se diferenciaron eficientemente dentro de los blastocistos de rata, formando las estructuras básicas de un riñón. Después de ser implantados en ratas pseudo-embarazadas, los blastocistos complementados maduraron en fetos normales. Sorprendentemente, más de dos tercios de los neonatos de rata resultantes contenían un par de riñones derivados de las células madre del ratón.
La detección adicional mostró que todos los riñones estaban estructuralmente intactos y que al menos la mitad podría producir orina. "Nuestros hallazgos confirman que la complementación de blastocistos interespecíficos es un método viable para la generación de riñones --afirma la autora correspondiente del estudio Masumi Hirabayashi--. En el futuro, podría usarse este enfoque para generar órganos humanos derivados de células madre en el ganado, lo que podría extender la vida útil y mejorar la calidad de vida de millones de personas en todo el mundo".