El Observador | Nuevas evidencias científicas indican que algunos componentes de la dieta influyen en el estado de ánimo. Pero, cuáles son los alimentos que contribuyen al control del estrés. Te lo contamos a continuación:

 

 

Que la leche es un alimento rico en vitaminas, calcio y proteínas no es una novedad. Lo que probablemente se desconoce es que también es eficaz en el alivio de las tensiones cotidianas, como lo muestra un estudio realizado en la Universidad de Trier, en Alemania, y publicado recientemente en la British Food Journal. Según este estudio, el consumo diario de leche mejora el estado de ánimo, disminuye el estrés y estimula las funciones cognitivas. Sus altas concentraciones de triptófano, un aminoácido esencial, intervienen en la producción de serotonina, un neurotransmisor asociado a los estados de tranquilidad y bienestar, con lo cual contribuye a combatir el estrés.

 

 

Entre los beneficios que se le atribuyen se encuentran su acción estimulante sobre el sistema nervioso, sus propiedades antidepresivas y su capacidad de protección cardiovascular. Investigadores americanos han descubierto que su consumo frecuente (unos 40 g de chocolate negro al día), contribuye a la reducción en los niveles de la hormona del estrés: el cortisol, debido a su contenido en niacina y ácido pantoténico. Un estudio llevado a cabo en la Universidad de Adelaida, en Australia, mostró también que su consumo frecuente ayuda a reducir el riesgo de sufrir hipertensión arterial, problema relacionado íntimamente con el estrés.

 

 

Ayudan a controlar el estrés de la vida cotidiana y a reducir la presión sanguínea y niveles de colesterol, según indican expertos de la Universidad Estatal de Pennsylvania. Estas conclusiones fueron publicadas en la revista Hypertension de la Asociación Americana del Corazón, luego de estudiar a un grupo de personas a las que se les medía presión sanguínea y resistencia vascular periférica en situación de reposo y de estrés.

 

 

También contribuye a la prevención de la depresión, la ansiedad y el estrés, de acuerdo a una investigación realizada en la Universidad Complutense de Madrid. Según la misma, beber una copa de vino tinto por día ayuda a mejorar la circulación, tiene un efecto antiinflamatorio y combate los radicales libres responsables del estrés oxidativo. Según un estudio realizado en el Instituto de Investigación The Scripps en Estados Unidos, el responsable de estos beneficios es un componente conocido como resveratrol.

 

 

Aportan fibra, sustancias antioxidantes y ácidos grasos saludables. Expertos de la Penn State University mostraron que un solo puñado de este fruto seco por día puede contribuir a la reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares y de hipertensión como repuestas al estrés, de acuerdo a un estudio publicado en la Journal of the American College of Nutrition.

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