El espacio de trabajo es el reflejo de cambios más profundos que se están sucediendo en forma continua en el mundo contemporáneo y que están modificando la forma en la que se entiende el trabajo y la oficina.
El estilo de vida, la inmediatez de las comunicaciones y la necesidad imperante de estar conectados 24/7 han hecho que la forma en la que nos desenvolvemos en el trabajo haya cambiado tangencialmente durante la última década.
Contract Workplaces identificó las fuerzas que están redefiniendo las oficinas, en las que la demografía, la tecnología, la globalización, la cultura y la sustentabilidad juegan un rol fundamental. Juntas demuestran que el trabajo ya no se tratará de edificios donde los trabajadores se trasladen desde sus casas para acceder a la infraestructura, la tecnología y la información. “El lugar de trabajo será cada vez más permeable y sus límites se desdibujarán entre una multiplicidad de espacios físicos y virtuales”, señala Víctor Feingold, CEO de la compañía.
Cinco Tendencias
1. La demografía. “Actualmente, y por primera vez en la historia de la humanidad, la población urbana es tan grande como la población rural y se estima que en los próximos 40 años alcanzará los dos tercios de la población pero con un condimento extra: seremos 9.500 millones de seres humanos”, dice el experto. En estas urbes colapsadas, viajar de un lugar a otro en ciertos horarios será prácticamente imposible; por lo que será imprescindible un cambio radical en la forma en la que trabajamos. “Entraremos en la era del trabajador nómade, el cual se moverá provisto con su propia tecnología para poder conectarse en cualquier momento y desde cualquier lugar”, agrega Feingold.
2. La tecnología. Está produciendo dispositivos móviles cada vez más potentes y a más bajo costo. Estos nuevos equipos inteligentes permitirán hacer uso de todo el poder de las computadoras y la conectividad, a través de redes 4G, nos proveerá de aplicaciones desde “La Nube”, independientemente de nuestra localización.
3. Globalización. El fin de las distancias significa que los centros donde la producción y los servicios son más baratos pueden hoy estar tan conectados con las otras áreas de la empresa como si estuvieran sólo un piso más abajo. Esto ha obligado a las organizaciones a redefinir sus estrategias inmobiliarias para que vuelvan a tener racionalidad económica.
4. Las nuevas generaciones. Otra de las fuerzas que modelan los actuales espacios de trabajo está dada por los cambios sociales: una gran variedad de personas de distinta edad, sexo, raza y nivel de educación conviven bajo un mismo techo. “Captar, motivar y retener a los talentos es una de las claves que será necesario profundizar para acceder al éxito en los negocios del nuevo siglo”, afirma el directivo.
5. La sustentabilidad y RSE. La arquitectura sustentable propone una serie de prácticas tendientes a minimizar el impacto negativo de la construcción sobre el planeta. Esto incluye una mayor eficiencia en el uso de la energía, la aplicación de “energías limpias” no contaminantes, el uso eficiente del agua, el aprovechamiento de la luz solar y la ventilación natural, el empleo de materiales producidos con baja emisión de carbono, el uso de maderas certificadas provenientes de bosques reforestados, etc.
“La gran mayoría de las empresas que han decidido tomar este camino cuentan con programas de separación de residuos y posterior reciclaje para lo cual necesitan el apoyo de todos sus trabajadores.”, señala el ejecutivo. “El mundo del trabajo no es ajeno a esta realidad cambiante, sin embargo, para prosperar en este contexto, el desafío de las empresas consistirá en estar preparadas para afrontar lo que vendrá, generando modelos flexibles y estableciendo las condiciones necesarias para fomentar la innovación y creatividad en los espacios de trabajo", concluye Feingold.