El mexicano Gabriel Ripstein gana como la Mejor Ópera Prima con la película "600 millas", mientras que los chilenos Patricio Guzmán y Pablo Larraín reciben Oso de Plata por el documental “El botón de nácar” y la película “El club”, respectivamente.
“Encantado y privilegiado” se muestra el cineasta mexicano Gabriel Ripstein con el importante premio obtenido en la última versión del Festival de Cine de Berlín como la Mejor Ópera Prima del certamen.
Su película “600 millas” se centra en el negocio del tráfico de armas entre Estados Unidos y México. El cineasta cuenta que el filme se basa en su experiencia en suelo estadounidense, al comprobar “el fácil acceso de los ciudadanos a las armas”, según explica.
"La verdad es que no quería ser juez o poner etiquetas, sino mostrar las cosas como son", recalca.Más que cine político, Ripstein explica que lo suyo es “ser un contador de historias".
Ripstein quiso dejar claro que no es un cineasta político, sino "un contador de historias" y avanzó que sus propios proyectos también tendrá que ver con ese lado oscuro de la vida que le asusta y le interesa, aunque no cree que vuelva a utilizar como tema la realidad mexicana.
La Mejor Ópera Prima de la Berlinale cuenta la historia de Arnulfo, un joven que trafica armas de Arizona a México para un cartel de la droga y que toma como rehén a un agente federal estadounidense, al que introduce ilegalmente en su país.
Por su parte, Chile se inscribe con dos importantes premios en el festival: dos Osos de Plata.
"El Club", la película de Pablo Larraín centrada en un grupo de sacerdotes extraviados entre gustos inconfesables y el poder, obtiene el Gran Premio del Jurado, segundo galardón del festival tras el Oro que obtuvo el iraní Jafar Panahi con "Taxi”.
El reconocido documentalista Patricio Guzmán, en tanto, gana el segundo lugar de la competencia con el guión de “El botón de nácar", trabajo audiovisual que arranca en el desierto de Atacama y recala en el cementerio marino que rodea la isla de Dawson, escenario de sucesivos genocidios.
Larraín recibe su galardón de manos de una emocionada colega peruana Claudia Llosa, Oso de Oro en el 2009 con "La teta asustada" y ahora miembro del jurado internacional que presidió el director estadounidense Darren Aronofsky.
Guzmán, también contento, se hizo acompañar sobre el escenario del Berlinaler Palast por su esposa, Renate Sachse. La jornada del sábado comenzó buena para el documentalista al recibir el Premio Ecuménico de los jurados independientes del festival.
También hubo premios en la sección no oficial del evento alemán: "Nasty Basty", del chileno Sebastián Silva, gano el Teddy al mejor filme de contenido homosexual por esa película exhibida en la sección Panorama, mientras "San Cristóbal", de su compatriota Omar Zúñiga, recibía el correspondiente a cortometrajes.
La coproducción uruguaya-chilena "El hombre nuevo", de Aldo Garay, también tuvo un Teddy en el apartado de documentales, a lo que se sumó el galardón Arte Internacional del mercado de coproducciones para la directora chilena Marcela Said, con "Los Perros".