Aunque aún existen dificultades y brechas evidentes respecto al uso de plataformas digitales, la capacitación de los docentes asoma como una necesidad permanente para mejorar la experiencia de enseñanza, incluso más allá de la pandemia.

No solo las industrias más competitivas y demandantes de personal están buscando profesionales con competencias técnicas digitales, sino que también otros sectores, como el educacional, en el cual -producto de la pandemia-  están solicitando cada vez más profesores que dominen metodologías de enseñanza online.

En este periodo, los profesores se han visto tremendamente sobrecargados de trabajo. Además, tuvieron que adecuarse a la nueva modalidad de enseñanza remota. Si bien las escuelas los capacitaron para que estuvieran al día en estas nuevas demandas e implementando plataformas para mejorar la experiencia de estudiantes y docentes, aún existen dificultades.

Por un lado, está la compleja transición que han experimentado algunos docentes, revelando la brecha de conocimiento en este ámbito. Por otro lado, se ha evidenciado también la pérdida de aprendizaje durante la pandemia.

Nuevas competencias

Según explica Johana Juacida, gerente de Proyectos en la consultora BHT Chile, “una de las tendencias que vemos es que los colegios buscan que los profesores se familiaricen y puedan hacer procesos educativos desde la tecnología, que es algo que antes no se había visto”.

Por esto, al momento de seleccionar a los profesores, Juacida indica que “ya no es solo si es capaz de realizar una didáctica específica o utilizar metodologías de enseñanza acorde al aula, sino que también se debe evaluar cómo usan la tecnología en beneficio de los procesos de aprendizaje. Y eso es un cambio que ha hecho que los profesores desarrollen herramientas y se tengan que capacitar”.

Sin embargo, con la rapidez con la que los colegios tuvieron que dejar de hacer clases presenciales y buscar alternativas, los profesores no alcanzaron a capacitarse. Es más, en varios países ya se registraba una brecha digital entre docentes y estudiantes, lo que quedó en evidencia el año pasado y se mantiene hasta ahora.

A diferencia de otras escuelas, en el colegio Markham, en Perú, capacitaron a los docentes en el uso de estas herramientas antes que comenzara la cuarentena, por lo que cuando se impuso ya tenían lo básico implementando.

Ver la enseñanza y el aprendizaje de forma diferente

En el colegio Markham han continuado con clases online a través de videollamadas, que se realizan en intervalos, en clases completas o en grupos pequeños. Estas se complementan con otras plataformas como Nearpod, Seesaw para Primera Infancia y Google Classroom para Primaria y Secundaria, así como plataformas alternativas como Spatial Chat y Teams, que se ofrecen como una opción alternativa a Zoom.

“Un cambio como este obligó al personal a ver la enseñanza y el aprendizaje de forma diferente. Esto no sucedió de un día para otro, pero nos ajustamos lentamente a la nueva situación encuestando a los padres, estudiantes y al personal. Este proceso no requirió la contratación de nuevos profesores, sino muchas discusiones sobre cómo logramos aprender y trabajar en colaboración compartiendo buenas experiencias y prácticas”, indica Dipak Mondal, coordinador de Tecnología para Primera Infancia y Primaria del Colegio Markham.

A raíz de todo esto, Mondal dice que aspiran a que sus profesores incrementen su capacidad de investigar, crear, comunicar, colaborar y organizar el uso de herramientas digitales. Todo esto es clave en este momento, porque entre las dificultades que enfrentan los profesores está el mantener a sus alumnos atentos. Por esto, las escuelas están solicitando ciertas habilidades y competencias digitales.

De acuerdo con Juacida “no sirve solo hacer una clase online, sino que se deben usar herramientas, ejemplos, revistas virtuales, murales o hacer subgrupos en sala si es que usan plataforma Zoom, para que los alumnos interactúen. Si solo hacen una clase como se hacía antes, el alumno ni siquiera estará pendiente, porque es mucho más monótono. Se pierden los movimientos y las inflexiones de voz, que se vuelve mucho más plana”.

¿Qué pasará después de la pandemia?

Sobre si la tecnología se mantendrá en un futuro pos-COVID-19, es probable que muchos colegios adopten definitivamente la tecnología, aunque en unos meses más puedan volver a dictar clases de manera presencial. En Markham, por ejemplo, una vez que regresen los alumnos su enfoque será principalmente el aprendizaje socialmente interactivo y colaborativo.

Sin embargo, añade Mondal, “los educadores estarían encantados de facilitar algunas de sus clases, tareas y evaluaciones a través de herramientas en línea. Las habilidades digitales aprendidas durante el aprendizaje en línea han motivado a nuestros profesores y estudiantes a adaptarse a la “nueva normalidad” de la enseñanza y aprendizaje, donde las habilidades y competencias digitales son innegables”.

Juacida cree que “en muchos colegios van a dejar la tecnología como base, van a realizar más reuniones virtuales. La tecnología vino para quedarse en muchos ámbitos, en los colegios también. Y en varios de ellos han hecho capacitaciones a apoderados a través de esta tecnología”.

No hay que olvidar que pese a que varios colegios no han podido realizar sus clases debido a la distancia o se han complicado con la tecnología, existen otros casos en que la experiencia virtual ha sido mejor que lo presencial. Es por eso que los docentes tendrán que saber adaptarse y enfocarse en reducir esta brecha digital mediante capacitaciones, donde los colegios deben ser activos en este proceso.