Los implicados, a los que se les imputó cargos en octubre de 2017, son bien conocidos: se trata de Óscar Javier Sandoval Estupiñán, Francisco José Sales Puccini, Carlos Sales Puccini, Jorge Nempeque Domínguez, Ronald Ricardo Ramos Daza y Juan Pablo Robles Álvarez.
Aunque el inicio del juicio contra los seis médicos que habrían obtenido el título de cirujanos plásticos de manera fraudulenta en Brasil estaba programado para el 6 de septiembre, tuvo que se aplazado. La audiencia, a petición de la defensa, se prolongará y se llevará a cabo el 27 de noviembre.
Los implicados, a los que se les imputó cargos en octubre de 2017, son bien conocidos: se trata de Óscar Javier Sandoval Estupiñán, Francisco José Sales Puccini, Carlos Sales Puccini, Jorge Nempeque Domínguez, Ronald Ricardo Ramos Daza y Juan Pablo Robles Álvarez. Están acusados de haber presentados documentos falsos que les permitieron obtener títulos de manera fraudulenta.
De acuerdo con la investigación de la Fiscalía, con los documentos aportados, médicos como Óscar Javier Sandoval y Francisco José Sales Puccini obtuvieron sus títulos de cirugía plástica de manera irregular, al parecer con la colaboración de una funcionaria del Ministerio de Educación. Los cursos que hicieron Brasil, como lo ha contado este diario en varias oportunidades, distan mucho de una especialización de Cirugía Plástica. Los tiempos de estudio fueron infinitamente menores a los de una residencia médica.
Como lo mencionó Fiscalía en la imputación de cargos el año pasado, estos galenos también tienen varias denuncias por realizar malas prácticas médicas que dejaron serias secuelas físicas a varios pacientes. Fraude procesal, falsedad en documento privado y concierto para delinquir son algunos delitos de los que fueron acusados.
Las víctimas han hablado en varias oportunidades. El caso más conocido es el de la periodista Lorena Beltrán, operada por Sales Puccini. “Pocos días después de operarme, uno de mis pezones estaba a punto de desprenderse del seno y mis heridas continuaban abiertas. Sales Puccini decía que ‘todo era normal’, que usara gelatina sin sabor y toallas higiénicas en mi sostén, para no escandalizarme con los líquidos que salían de mis senos. De su quirófano salí viva, por fortuna, pero deforme”, escribió ella en las páginas de este diario en octubre de 2017.
Esta semana otras mujeres que resultaron afectadas por estos médicos también se animaron a contar sus testimonios. Lucilda Briggs, de Panamá, y Jennilyn García Olivero, quien vive en Puerto Rico, relataron el suplicio que vivieron en manos de Juan Pablo Robles. “A los seis meses el seno derecho se me inflamó, se me abrió y me salió pus. Hablé con Robles, quien es con el que he tenido contacto todo el tiempo, y me dijo que es normal”, le contó a García El Espectador.