El Modelo Integral de Atención en Salud (MIAS), que busca establecer la figura de “médicos de cabecera” en zonas dispersas del país, ha dado prometedores resultados en el departamento de Guainía.
El Espectador. Desde hace ocho meses, cuando se implementó esta iniciativa por el Ministerio de Salud, la prestación de servicio en el departamento de Guainía ha aumentado más de 300 % con respecto a las condiciones en los años anteriores.
Las consultas de medicina general, las de urgencia y las de medicina especializada, incluso los exámenes de laboratorio, las citologías cervicovaginales, entre otros, han incrementado favorablemente. Logrando, asimismo, detectar a toda la población que presenta alto riesgo cardiovascular, obstétrico y de enfermedad neoplásica como cáncer de mama y cérvix, en la región amazónica. (Lea: Vuelve el “médico de cabecera”)
En este momento, MIAS opera como una alianza entre Coosalud EPS –Salud Familiar IPS, Hospital de San José, Hospital Departamental Manuel Elkin Patarroyo, la Fundación Universitaria de Ciencias de la Salud- FUCS y la institucionalidad indígena junto a los entes territoriales del Guainía, con el fin de cubrir la demanda en el territorio a través de un modelo de salud intercultural, no solo para sanar afecciones sino también para prevenir y formar a la comunidad. (Lea: Salud a donde no llegan los médicos)
Hasta ahora, MIAS se proyecta como la única experiencia que forma médicos en familia, en medio de territorios dispersos. La novedad es que se dirige a doctores que tienen sus familias en la misma zona a través de la FUCS, con su apuesta de educación superior, para enseñar en la región a cómo contribuir a los problemas de salud del mismo departamento, creando un nuevo enfoque para la formación médica en el país en sitios apartados y de difícil acceso geográfico.