La protesta de Colombia fue presentada en una carta ante el organismo después que se publicó un video en el que miembros de la misión aparecen bailando con ex combatientes de las FARC en un punto de preagrupamiento por la celebración de Año Nuevo.
Bogotá. Colombia pidió este miércoles a Naciones Unidas que mantenga la neutralidad de la misión de verificación del cese del fuego con las FARC y se declaró preocupada por la actitud de algunos observadores que, durante la celebración del Año Nuevo, bailaron con ex combatientes del grupo que participan del proceso para dejar las armas.
La protesta de Colombia fue presentada en una carta que envió la embajadora permanente ante la ONU, María Emma Mejía, al secretario general adjunto para asuntos políticos de la organización, Jeffrey Feltman, después que se publicó un video en el que miembros de la misión aparecen bailando con ex combatientes de las FARC en un punto de preagrupamiento.
"Este tipo de comportamiento desvirtúa el profesionalismo y neutralidad que debe caracterizar, en todo momento, al equipo que hace parte del Mecanismo Tripartito de Monitoreo y Verificación del Cese al Fuego y de Hostilidades Bilateral y Definitivo y Dejación de Armas", dijo la carta de Colombia.
El Gobierno colombiano pidió adoptar los correctivos necesarios para evitar que estas situaciones se vuelvan a presentar.
Previamente, la misión de la ONU en Colombia calificó de "inapropiado" el comportamiento de los observadores implicados y dijo que tomará las medidas que correspondan para evitar que se ponga en duda el profesionalismo y la imparcialidad de la organización, mientras que las FARC consideraron el hecho como un "show mediático".
El presidente Juan Manuel Santos y el máximo líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Londoño, firmaron el 24 de noviembre un acuerdo de paz que fue ajustado después de que el original fue rechazado en un plebiscito.
El Congreso de Colombia refrendó el acuerdo con el que se busca que unos 7.000 guerrilleros dejen las armas y conformen un partido político para poner fin a un violento conflicto de más de medio siglo que ha dejado 220.000 muertos y millones de desplazados.
En la actualidad, Naciones Unidas tiene 280 observadores en Colombia como parte de la misión de verificación del cese al fuego y de hostilidades entre el gobierno y las FARC.
