Para el consejero político de la Embajada de China en Ecuador, el crecimiento de los comercios chinos es normal debido a la estabilidad política y jurídica del país.
Son cerca de las 11:30 de un día martes. Óscar Mora llega al minimarket Yong, en la Florida Norte, al noroeste, a comprar un litro de leche. Es atendido por Qiu Ling Zhiyong, propietario del local, con quien entabla una conversación mientras paga en la caja.
Mora resalta que Zhiyong llenó un nicho de mercado en el sector, pues las tiendas de barrio muchas veces no abastecen y los supermercados están lejos y son caros.
Zhiyong abrió su local hace seis meses y le da trabajo a tres ecuatorianos. En un aún confuso español, Zhiyong, explicó que al llegar de China no trabajaba y analizó qué negocio poner y se decidió por el minimarket.
En la vía Perimetral, Luo Weikang abrió hace un año su minimarket El Único, está a pocas cuadras de la entrada de la línea 8. Weikang llegó hace siete años a Ecuador, desde la ciudad de Guang Dong, atiende el local con su esposa. Ofrece productos de primera necesidad, pero también mercadería de bazar y papelería. Antes ya había incursionado en el negocio de la comida con un chifa, pero no le dio resultado, por lo que optó por el minimarket.
También en la Perimetral, pero cerca de la Prosperina, Sandi Liu abrió el minimarket Katty desde hace un año. A diferencia de Weikang y Zhiyong, su español es casi nulo.
Liu emplea a cinco ecuatorianos y un chino. Cristhian Castro, de 20 años, uno de sus empleados, aseguró que Liu también tuvo un chifa antes de abrir al minimarket. “En el chifa no le fue bien, entonces puso el minimarket”, comentó Castro, quien aseguró les paga un poco más del sueldo base.
Para Qu Xun, consejero político de la Embajada de China en Ecuador, el crecimiento de los comercios chinos es normal debido a la estabilidad política y jurídica del país.
“Ecuador tiene un esquema legal que garantiza los derechos privados y empresariales, que dan confianza y que a largo plazo garantizan la proyección de las inversiones”, sostuvo Qu Xun, quien aseguró que China es el tercer socio comercial de Ecuador y que el intercambio de comercio alcanza cerca de los $ 3.300 millones.
José Antonio Hidalgo, presidente de la Cámara de Comercio Ecuatoriano-China, también confirmó el crecimiento de negocios chinos en Ecuador, y aunque asegura que no se lleva un registro, se refleja en los manifiestos de la Aduana y en la balanza comercial bilateral.
“Tenemos un déficit de $2 mil millones en la balanza con China”, señaló Hidalgo, quien agregó que la última cifra del 2016 da cuenta de una inversión directa china en Ecuador de $ 3 billones.
Según Pro Ecuador, la balanza comercial no petrolera de enero a mayo es deficitaria para Ecuador con $ 833,5 millones. Mientras el país exportó hacia China $ 187,5 millones, importó de ella $ 1.021 millones.