¿Te sientes satisfecho en tu empleo? ¿Conoces tus talentos? ¿Puedes identificar tus debilidades y trabajar para mejorar? Si contestaste que no a estas tres preguntas, probablemente necesitas realizar un proceso de autodescubrimiento.
Varias empresas están empeñadas por aumentar el nivel de satisfacción de sus empleados, invirtiendo en la marca empleadora, para lo cual se llevan a cabo programas con la misión de atraer y retener talento.
Es en este proceso donde generalmente se desarrolla un plan de carrera para los trabajadores, etapa en la que se analiza el talento profesional que tiene la empresa y el que necesita, de manera que se les pueda capacitar y así mejorar.
Pero no todas las empresas realizan este plan de carrera ni los profesionales se trazan objetivos laborales. El desconocimiento de las debilidades y las fortalezas es uno de los principales errores de varias personas, quienes con el tiempo pueden llegar a sentirse insatisfechos en sus empleos.
En general, los trabajadores suelen desconocer sus habilidades. Para Nery Nina, docente de la Dirección de Extensión y Proyección Universitaria de la Universidad de San Martin de Porres (USMP) y quien dictará el curso ‘Coaching: Herramientas para el desarrollo del talento’, es muy importante conocerse, porque esto hace una enorme diferencia al momento de desarrollar el potencial.
“Autoconocernos nos permite identificar nuestras fortalezas, lo bien que hacemos algo, lo que disfrutamos hacer y lo que nos resulta ejecutar de manera fácil. Es un espacio en el que fluimos y encontramos siempre posibilidades”, dice Nina.
Pero, ¿cómo esto se aplica al mundo laboral? De acuerdo con la docente de la USMP, al reconocer lo que nos destaca podemos convertirnos en una mejor oferta profesional. “Conociendo nuestros talentos podemos incrementar la autoconfianza, podremos ofrecer alternativas únicas y diferenciadoras y mostraremos pasión por aquello que representa nuestro talento natural y sentiremos una dosis de seguridad que permitirá ofrecer soluciones acordes a lo que la organización necesite”, agrega Nina.
Pero no todas las personas son capaces de reconocer sus talentos. No porque no quieran, sino que por la dificultad de hacerlo. Se requieren ciertas capacidades para esto, como el tener una mirada reflexiva y profunda, llevar a cabo un proceso de experimentación y exploración, y en algunos casos, utilizar el coaching y la mentoría, los que permiten determinar los talentos natos que traemos y el conjunto de habilidades que tenemos el potencial para desarrollar”.
Una vez que la persona toma consciencia de sus talentos, puede alinearse con su identidad y potencial profesional, lo que las encamina en su misión y propósito. Pero esto también se puede aplicar en grupo, ya que para las empresas es cada vez más relevante que sus trabajadores conozcan sus habilidades y las potencien.
De acuerdo con Nina, en este caso el líder es esencial en el desarrollo del talento de cada equipo, porque son ellos los que interactúan diariamente y conocen las fortalezas y oportunidades de mejora de cada miembro. “Con ayuda de herramientas para gestionar el talento permitirán que cada integrante sea cada vez más consciente y claro de sus talentos naturales y se proponga a trabajar aquellos aspectos de mejora que le permitirán convertirse luego en un miembro que conforme un equipo de alto desempeño”.
Nery Nina agrega que el coaching ejecutivo es una herramienta de desarrollo muy útil para que los líderes ayuden a sus trabajadores a conocerse, mediante el rol de “coach” en su equipo.
Por eso, dice la docente, es importante “entrenar a cada líder estratégico con esta herramienta, de manera que genere conversaciones de valor, que permita a cada miembro del equipo conocer, desarrollar y potenciar su talento y hacerse cargo de sus oportunidades de mejora”. De esta forma, se pueden desarrollar estrategias de equipo para optimizar los canales de comunicación, la confianza, la toma de decisiones y la resolución de problemas.
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