Desde STT Group recomiendan 5 tips.
Desde este lado del hemisferio, los meses de enero y febrero se han vuelto los preferidos para tomarse un merecido descanso y es que el calorcito de la ciudad se torna insoportable y muchos quieren arrancar de él. Pero al mismo tiempo se genera una alta demanda de permisos de esta índole y las organizaciones deben encontrar la forma de continuar funcionando con normalidad, sin que la ausencia del colaborador afecte la productividad de la organización.
Para Tatiana Suárez, country manager de STT Group, hay dos puntos importantes que se deben considerar al momento de hacer válido los permisos por vacaciones, el primero tiene que ver con que “el empleador se debe adaptar al nuevo esquema con el fin de minimizar cualquier impacto que pueda surgir en ausencia del colaborador si no es reemplazado por un sustituto temporal y por otro lado, el colaborador debe saber dejar en orden sus tareas para que su ausencia no genere efectos negativos en caso de no contar con alguien que lo apoye en sus tareas durante su ausencia”.
Aún así, desde la consultora explican que, en la mayoría de los casos, las tareas del empleado en descanso son cubiertas por compañeros de la misma área, u otras relacionadas, que cuenten con el conocimiento para desarrollar satisfactoriamente la suplencia hasta su regreso. De todos modos, y para evitar cualquier inconveniente, STT Group ha preparado 5 tips para aprovechar al máximo el descanso sin ver afectado el trabajo al regreso:
1. Período previo de adaptación: Volver a la oficina inmediatamente después de un periodo largo de descanso no es buena idea. Puede que hayas escuchado el concepto "estrés post vacaciones" y sí, es real. De hecho, es muy común: el 50% de las personas logra superarlo dentro de las primeras dos semanas de trabajo. Sin embargo, para evitar esto, recomendamos tomar un período previo de adaptación, de modo que para el primer día de empleo ya estés completamente recuperado.
2. La primera semana es para reorganizar: Esto siempre es lo más difícil, muchos de tus colegas estarán igual o más cansados que antes. Por ello,llo primero es revisar la carga laboral: repasar qué quedó pendiente y qué cosas tienen prioridad. Organizar el trabajo es la mejor manera para distribuir el tiempo eficientemente, y como probablemente hubo mucha actividad durante tu ausencia, permítete esa primera semana para ordenar la agenda y examinar todo lo que tienes que hacer.
3. Siempre deja un pequeño avance: Antes de salir de vacaciones- avanzar lo que más puedas en las tareas que sabes te van a consumir más tiempo y energía al regreso, por ejemplo elaboración de informes. En otras palabras: adelanta un poco de pega. Cuando vuelvas, agradecerás haberlo hecho.
4. Planifica: En vez de tomar la primera tarea que se te cruce y empezar a trabajar en ella, concéntrate en dar prioridad a tus quehaceres, distinguiendo lo importante de lo urgente. Para no enredarte, elige algunas de las cosas que tienes que hacer y ordénalas primero. Con eso, podrás retomar tu día a día laboral sin necesidad de estresarte.
5. Diviértete en cada oportunidad que tengas: El tedio solo puede contrarrestarse con entretenimiento, por lo que ver esa película de la que tanto te han hablado, ir a un concierto a mitad de semana o simplemente compartir un rato con los amigos, puede ser una gran forma de subir el ánimo y enfrentar cada día con la mejor disposición. Es más, si tu empresa lo permite, no es mala idea organizar una pequeña instancia de retorno al trabajo, nada formal ni que robe mucho tiempo: el objetivo es que todos se sientan bienvenidos y apreciados.
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