Por Dr. Héctor González, Presidente de la Sociedad de Prótesis y Rehabilitación Oral de Chile.
Es un hecho que la población mundial está envejeciendo progresivamente, como consecuencia de las mayores expectativas de vida, disminución de la tasa de mortalidad y disminución de la tasa de natalidad. Esto ha dado como resultado al fenómeno del envejecimiento un relieve sin precedentes, constituyéndose la situación del adulto mayor (AM), en un tema relevante y emergente de la sociedad contemporánea.
En el año 2025 aproximadamente el 15 % de la población mundial sobrepasará los 60 años y el número de adultos mayores de 80 años es el que más aumenta cada año.
En el año 2000 había 600 millones de personas mayores de 60 años
Se estima que para el 2050 habrá 2 billones de mayores de 60 años, de los cuales la gran mayoría estará en países en desarrollo, situación que se irá incrementado con el correr de los años dando origen a lo que se conoce como 4ª edad, mayores de 80 años.
Un número importante de personas de la 3ª y 4ª edad son desdentados totales, y por lo expuesto anteriormente, este número se vería incrementado con el correr de los años, lo cual nos plantea un desafío importante en la rehabilitación y mantención de la salud bucal de esa parte de la población. Es sabido que la alimentación en los adultos mayores es un tema relevante, por lo tanto es fundamental ofrecer opciones para obtener y mantener una correcta función de los aparatos protésicos que ellos portan.
Es cierto que con el advenimiento de los implantes se ha podido dar una buena solución a una parte de los pacientes desdentados totales, sin embargo no todos ellos tienen acceso a este tipo de solución, y especialmente en los casos complejos tipo III y IV según clasificación PDI, es menester entregar y enseñar a utilizar elementos que ayuden en la función de los aparatos removibles.
Entre estos elementos, contamos con los adhesivos para prótesis, los cuales no son nuevos en nuestra profesión, sin embargo su uso no es tan masivo en nuestro medio como debiera ser, sobretodo y tal como se indicó en los casos complejos. Sin embargo, diversos autores como Grasso y otros, demuestran la validez en el uso de adhesivos, al igual como sucede en diversas regiones o países, lo cual está incidiendo en el cambio de actitud de los profesionales hacia estos productos.
Uno de los requisitos fundamentales es que los aparatos protésicos deben estar bien elaborados y en buen estado, ya que es verdad que muchas veces se ha dicho que estos productos son para usarse cuando las prótesis están en mal estado o desajustadas, sin embargo es todo lo contrario, su mejor función es con prótesis bien adaptadas, con buena estabilidad y retención en la medida de lo posible.
Los adhesivos contribuyen a reducir la cantidad de restos de alimentos que se alojan bajo las prótesis, incrementar la retención y estabilidad mejorando la resistencia al desalojo ante las fuerzas masticatorias, ante la deglución y al hablar, otorgando mayor confort y seguridad a los pacientes. En general los pacientes prefieren usar cremas que polvos adhesivos, por su facilidad de aplicación y de remoción.
Existen varios estudios que demuestran y comprueban lo anterior, y entre ellos se puede mencionar una revisión efectuada sobre el uso de adhesivos, publicada en el año 2010, y que muestra, a través del tiempo, a diferentes autores con sus indicaciones y situaciones clínicas en que el uso de estos productos está indicado.