Marcelo Matamala, consultor de Page Interim de Michael Page, recomienda algunos tips para lograr conseguir el deseado aumento de sueldo.

El momento y la manera de hacerlo hacen la diferencia. Las personas solían pensar que los problemas personales, las dificultades en casa o los inconvenientes económicos propios eran el argumento perfecto para convencer al jefe. Si usted cree que ese es el camino, es momento de cambiar de estrategia, pues ese tipo de argumentos son los menos considerados por parte de la compañías.

La consultora experta en reclutamiento especializado, Page Group, recomienda algunos tips para lograr conseguir el deseado aumento de sueldo:

Véndase. En lugar de exponer las dificultades de su vida privada, demuéstrele a su jefe su capacidad, su proactividad, y hágalo sentir que usted es indispensable.

“Si se va con resultados que avalen el buen desempeño y cómo se ha aportado al desarrollo de la compañía, hay mayor posibilidad de que se pueda lograr el aumento”, dice Marcelo Matamala, consultor de Page Interim de Michael Page.

Maneje sus expectativas y plantee una cifra razonable. Para el experto, el aumento de sueldo debe estar entre un 15 y un 20 por ciento.

Hable en los términos que habla su jefe, eso genera empatía. Céntrese en demostrar por qué un aumento de sueldo no solo beneficia a usted sino a la organización para la que trabaja. Según Matamala, las habilidades blandas como el liderazgo y la compatibilidad con los compañeros juegan un papel clave, sin embargo, éstas deben ir acompañadas por “datos duros” como resultados, superación de metas y números que reflejen la buena gestión.

Sin embargo, enfocarse solamente en el pasado puede ser contraproducente. Asegúrese de que su mensaje se apoye en las metas a futuro y los proyectos con los que usted desea seguir aportando al crecimiento de la empresa.

Deje las cosas por escrito. Después de la conversación, es bueno dejar la solicitud firmada como recordatorio para el jefe. Entre más simple sea la comunicación, mucho mejor: enfoque su carta en los datos de su gestión y sus resultados.

Si su solicitud no obtiene respuesta, recuérdele a su jefe aproximadamente en dos semanas. No lo deje enfriar.

Si por el contrario recibe una respuesta negativa, espere tres meses. Para Matamala, ese es el tiempo prudente para volver a poner las cartas sobre el escritorio del jefe.

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