ERICVA es una nueva escala creada por científicos españoles, que concluyeron que cuenta con una buena capacidad predictiva y es mejor que las herramientas ya existentes.
SINC. Investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Valladolid (UVa) y del Hospital Clínico Universitario han diseñado una nueva escala, denominada ERICVA, para medir el riesgo quirúrgico en pacientes que sufren isquemia crítica, la forma más grave de enfermedad arterial en las extremidades inferiores, asociada con un alta tasa de mortalidad y de amputación mayor (aquella que se realiza por encima del tobillo).
Cuando se produce una isquemia crítica, el tratamiento más efectivo es la revascularización, pero no siempre es técnicamente posible ya que muchos de estos pacientes se encuentran en una situación demasiado frágil como para soportar una intervención de estas características, siendo desfavorable la relación riesgo-beneficio.
“El tratamiento farmacológico de la isquemia crítica es solo efectivo cuando las lesiones no están muy avanzadas. Pero si hay una lesión grave, como una gangrena, normalmente solo se podrá revertir con una mejor vascularización de la zona, es decir, consiguiendo que llegue más sangre ya sea por técnicas endovasculares –una alternativa menos invasiva con la que se trata de mantener dilatadas las arterias colocando un stent o una mala cilíndrica–, o por técnicas de cirugía abierta convencional, colocando tubos –bypass– para crear una ruta alternativa para el flujo sanguíneo", explica el catedrático de la UVa Carlos Vaquero Puerta, jefe del Servicio de Angiología y Cirugía Vascular Hospital Clínico Universitario de Valladolid y coautor del trabajo.
Así, los especialistas se encuentran con la difícil disyuntiva de establecer qué pacientes que sufren de isquemia crítica de las extremidades inferiores se pueden beneficiar de la revascularización. En este sentido, las escalas que estiman el riesgo quirúrgico pueden proporcionar una herramienta objetiva en la toma de decisiones.
“Existen escalas de este tipo pero son muy complejas, lo que limita su aplicación. Es necesario buscar el equilibrio con una escala que sea práctica de utilizar y que además tenga poder predictivo", precisa Vaquero, quien apunta que así surgió el diseño de ERICVA, que ha centrado la tesis doctoral de José Antonio Brizuela Sanz.
El objetivo ha sido diseñar una nueva puntuación de riesgo simplificada, utilizando parámetros sencillos de obtener, y comparar su capacidad de predicción con otras escalas existentes, denominadas PREVENT III y Finn Vasc.
“Hemos detectado una serie de parámetros, fundamentalmente biológicos, que permiten valorar de forma sencilla la situación del paciente y determinar si pueden someterse al tratamiento de revascularización o no", apunta el especialista.
Para ello, llevaron a cabo un estudio observacional retrospectivo de pacientes sometidos a revascularización (abierta o endovascular) en el Hospital Clínico de Valladolid entre 2005 y 2010. Se analizaron 672 casos, que fueron vigilados posteriormente un promedio de 778 días. La supervivencia libre de amputación fue del 84,8% a los 30 días y del 63,1% a un año.
Los investigadores seleccionaron un número de variables asociadas con el fallecimiento o la amputación mayor en estos pacientes para crear la escala ERICVA y una versión simplificada de la misma, que incluye solo los cinco elementos que tuvieron un mayor peso: recibir diálisis, haber tenido un cáncer en los cinco años anteriores, un nivel de hematocrito menor al 30%, una proporción de neutrófilos/linfocitos mayor a cinco y encontrarse en la categoría 6 de la clasificación de Rutherford para la enfermedad arterial periférica.
El estudio concluyó que la escala ERICVA cuenta con una buena capacidad predictiva para determinar el fallecimiento o amputación mayor en el ámbito clínico, y que es mejor que las puntuaciones existentes PREVENT III y Finnvasc.
Difusión a nivel internacional
Con el fin de promover su conocimiento y aplicación práctica, los investigadores vallisoletanos han difundido la nueva escala ERICVA entre los especialistas nacionales, a través de la revista Angiología, órgano de comunicación de la Asociación Española de Angiología y Cirugía Vascular (SEACV); a nivel iberoamericano, mediante la Revista Iberoamericana de Cirugía Vascular; y a nivel internacional en el European Journal of Vascular and Endovascular Surgery, así como en congresos y reuniones internacionales.
“Nuestro objetivo es que la herramienta pueda ser utilizada por el mayor número de especialistas posible", subraya Carlos Vaquero.