Buen ambiente laboral, capacitaciones y mejor salario, son algunos de los mencionados.
"En periodos en donde la economía está en crecimiento y existe casi pleno empleo, hay una mayor probabilidad que los profesionales y ejecutivos destacados empiecen a mirar hacia el lado, buscando mejores oportunidades laborales", dice Benjamín Toselli, presidente ejecutivo de IT Hunter.
En este sentido, continúa el ejecutivo, es preciso que las organizaciones cuenten con políticas de retención, lo que lamentablemente no ocurre en todas las compañías de América Latina. "Solamente se conforman con pagar un sueldo de mercado", dice.
Para evitar esta "fuga de cerebros" se debe “entregar estímulos, tales como un proyecto de largo plazo que les permita identificarse y proyectarse, escala de incentivos y premios, acceso a perfeccionamiento y capacitación, y un grato ambiente de trabajo, por mencionar algunos”.
En relación al primer aspecto, Toselli destaca que para los ejecutivos y profesionales sobresalientes es muy importante contar con un plan de trabajo en el tiempo, que comprenda objetivos y desafíos estimulantes, y con los cuales se sientan comprometidos. A la vez, deben existir los espacios para que los interesados puedan desarrollar una carrera profesional.
Asimismo, y asociado a la consecución de esas metas, es fundamental que se fijen incentivos y premios.
"En el caso de los ejecutivos, por ejemplo, estamos hablando de personas que, junto con poseer experiencia y conocimientos en una determinada materia, deben tener ciertas habilidades en liderazgo, trabajo en equipo, comunicación y motivación que les permitan dirigir con éxito a un grupo de colaboradores y alcanzar las metas establecidas. Entonces, esa gran responsabilidad debe ser premiada adecuadamente”, afirma el directivo de IT Hunter.
Una tercera estrategia para la retención de los talentos que menciona Toselli se vincula a que las organizaciones dispongan de planes de perfeccionamiento y capacitación permanentes, de tal manera de entregar aquellos conocimientos y/o desarrollar ciertas competencias que los colaboradores vayan necesitando con los años.
Un cuarto elemento en esta temática, consiste en que las organizaciones dispongan y fomenten un buen ambiente de trabajo, basado en normas claras de convivencia y armonía. Además, deben contar con la infraestructura adecuada para que los trabajadores puedan realizar bien su labor.
“Idealmente, las compañías también debieran hacer un esfuerzo por mejorar las remuneraciones de sus empleados, por sobre lo que dicta el mercado. De esta forma, la probabilidad de que sus ejecutivos y profesionales destacados emigren a otra empresas disminuirá en el corto plazo”, puntualiza.