Con una manzana te demostramos que pagas mucho por flojo
Jueves, Junio 15, 2017 - 11:56
Comprar una fruta en ciertas tiendas resulta sumamente costoso, según determina este sondeo realizado en México.
Ante la búsqueda de opciones más saludables por parte de los consumidores, formatos como Starbucks, Oxxo y 7-Eleven ponen a su alcance frutas que llegan a ser hasta 352% más caras que en una tienda de autoservicio.
Dichos comercios han crecido gracias a la cercanía con los clientes, pues se pueden encontrar cerca de oficinas y viviendas, además de que resuelven las necesidades inmediatas de los compradores gracias a su oferta de productos.
En un sondeo hecho por Excélsior se observó que quienes prefieran consumir una manzana en vez de productos procesados tendrán que desembolsar 18 pesos en Starbucks (US$ 1), 11 en el Oxxo (US$ 0,6), y 13,50 pesos (US$ 0,75) en las tiendas de conveniencia 7-Eleven.
Esto, en contraste con lo que se paga en una tienda de autoservicio como Walmart, donde el precio del kilo de manzana es de aproximadamente 32.90 pesos (US$ 1,8), pero ayer su precio fue de 19.90 (US$ 1,1), oferta que forma parte de los Martes de Frescura, una promoción de la firma que otorga descuentos en productos como frutas y verduras.
Considerando el valor más bajo y que un kilo equivale aproximadamente a cinco manzanas, el precio por unidad es de 3.98 pesos (US$ 0,22); si se toma en cuenta el valor más alto en autoservicios, el precio de una manzana asciende a 6.60 pesos (US$ 0,37); de ahí que la fruta ofrecida por Starbucks puede ser 352% más costosa, en 7-Eleven, 239% más cara y en Oxxo , 176 por ciento.
Para la compradora Viridiana Hernández, “18 pesos (US$ 1) es muy caro para una manzana”, quien agregó que ha encontrado dificultades para seguir una dieta saludable fuera de casa, pues en las tiendas de conveniencia lo que predominan son las botanas y refrescos.
“Si vas al mercado y compras lo necesario para la semana o la quincena y preparas todo en casa es más barato que hacer esas mismas comidas fuera”, consideró.
Mucho tiene que ver con el formato, también entre los supermercados hay ciertos diferenciadores. No es lo mismo un Superama que un Walmart, aunque sean de la misma cadena, pero también hay diferenciadores por zonas y por el tipo de cliente al que quieren llegar. Eso es lo que determina los precios al final”, comentó Alejandro Saldaña, analista de Grupo Financiero BX+.
De acuerdo con el analista, el proveedor y los acuerdos que logra con la tienda que venderá su cosecha también pueden tener impacto en los precios de un mismo producto.