"La propuesta de la primera ministra May del 30 de junio crea una serie de interrogantes de naturaleza legal y política", señaló el lídel del Consejo Europeo en referencia a la cumbre que comienza el jueves en Bruselas.
El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, condicionó este miércoles (20.03.2019) una extensión corta de las negociaciones sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE) a que la Cámara de los Comunes ratifique el acuerdo de retirada cerrado entre Londres y Bruselas.
"A la luz de las consultas que he tenido los días pasados (con líderes de la UE), creo que una extensión corta será posible, pero estará condicionada a un voto positivo del acuerdo de retirada en la Cámara de los Comunes", dijo Tusk en una declaración ante la prensa tras hablar por teléfono con la primera ministra británica, Theresa May.
Añadió, por tanto, que la duración de esa prolongación "sigue abierta", a pesar de que May solicitó este miércoles en una carta al propio Tusk retrasar el "brexit" hasta el 30 de junio de este año.
"La propuesta de la primera ministra May del 30 de junio, que tiene sus aspectos positivos, crea una serie de interrogantes de naturaleza legal y política. Los líderes discutirán esto mañana", indicó Tusk en referencia a la cumbre que comienza el jueves en Bruselas.
El pedido de May. Después de que la Cámara de los Comunes votara el jueves pasado a favor de posponer la salida del Reino Unido, la primera ministra británica solicitó este miércoles la prórroga.
"Le escribí esta mañana al presidente (del Consejo Europeo, Donald) Tusk informándole que Reino Unido desea una extensión del Artículo 50 (que rige la salida de un país miembro) hasta el 30 de junio", explicó May a los diputados, muchos de los cuales esperaban que la prórroga fuese significativamente mayor.
Los líderes de los veintisiete países que seguirán en el club comunitario tras la marcha británica, que deben dar luz verde a ese retraso por unanimidad o rechazarlo, tienen previsto analizar esa cuestión en la cumbre que celebran el jueves en Bruselas.
La fecha propuesta por May resulta problemática si el Reino Unido, como ha adelantado ella misma, decide no celebrar comicios a la Eurocámara.
Según las normas comunitarias, todos los Estados miembros de la UE están obligados a organizar la votación al Parlamento Europeo en su territorio y si se da luz verde a una prórroga hasta el 30 de junio, el Reino Unido estaría violando la legislación si no celebra elecciones, a pesar de que el 2 de julio, cuando se constituye la próxima Eurocámara, ya no pertenecería a la UE.