Una comisión, que trabaja a puertas cerradas, debe elaborar un informe no vinculante sobre la decisión de la presidenta Fernández de remover a Martín Redrado por incumplimiento de deberes.
Buenos Aires. Un comité del Congreso de Argentina comenzó el martes a debatir la remoción del jefe del Banco Central bajo una fuerte presión del gobierno, que busca terminar con una disputa por el mando de la autoridad monetaria que amenaza con complicar aún más a la economía del país.
La comisión, que sesiona a puertas cerradas, debe emitir un consejo para que la presidenta Cristina Fernández pueda destituir al titular del Banco Central, Martín Redrado, al que acusó de "incumplir deberes" por no acatar su orden de transferir al Gobierno reservas de la entidad.
El traspaso de US$6.569 millones, que luego fue bloqueado por la justicia, tenía como fin el pago de deuda pública, en momentos en que el país enfrenta severos problemas fiscales y prepara un millonario canje de bonos incumplidos como paso para volver a emitir deuda en el mercado voluntario.
El consejo de la comisión no es vinculante, por lo que Fernández, agobiada por conflictos con agricultores, medios de comunicación, una alta inflación y problemas de caja, quiere que se emita con rapidez, a fin de nombrar un nuevo presidente del Banco Central y acabar con una pelea de negativos efectos económicos.
"Para dar previsibilidad respecto de la Argentina, es necesario que la comisión que debe aconsejar sobre la salida del ex presidente del Banco Central (refiriéndose a Redrado) tome una resolución durante esta misma semana", dijo el líder del bloque de senadores oficialistas, Miguel Angel Pichetto.
La comisión debe "hacer un aporte a la estabilidad de una institución clave del país como lo es el Banco Central", agregó.
Este lunes, la presidenta Fernández pidió un trámite "breve y rápido".
Redrado cayó en desgracia con la mandataria por demorar la transferencia de reservas al Gobierno, aconsejado por el departamento jurídico de la entidad.
El domingo, la policía impidió que ingresara a su despacho en el Banco Central, que quedó bajo la conducción de su vicepresidente, Miguel Pesce.
El conflicto por el uso de las reservas y el despido de Redrado ha afectado el precio de los bonos del país y analistas han advertido que el previsto canje por US$20.000 millones de deuda podría sufrir atrasos.
Un integrante de la comisión, el diputado opositor y economista Alfonso Prat-Gay, ex presidente del Banco Central argentino, advirtió que los trabajos del comité durarán lo que sea necesario.
"La presidenta fue la que perdió dos semanas intentando echar a Redrado por decreto cuando no podía hacerlo, así que si el gobierno está apurado, que revisen ellos su propios pasos", explicó Prat-Gay, opositor de Fernández.
Redrado, un economista de prestigio internacional, debe ser escuchado por el comité del Congreso, que integra también el presidente de la comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados, el oficialista Gustavo Marconato, y el vicepresidente del país, el opositor Julio Cobos.