Conozca las razones que determinan la belleza de un rostro
Jueves, Octubre 8, 2015 - 12:11
Estudio de Harvard sorprende con un descubrimiento considerado una nueva ventana a la evolución y la arquitectura del cerebro social.
A pesar de que hay aspectos de la atracción que son bastante universales, y que –incluso- pueden estar codificados en los genes, un estudio liderado por la Universidad de Harvard en Estados Unidos muestra que las diferencias de opinión sobre la belleza de un rostro son -en su mayoría- resultado de experiencias personales, únicas para cada individuo.
El estudio, que se dio a conocer recientemente en la revista Current Biology, señala que los investigadores realizaron un primer experimento abierto, analizando las preferencias de más de 35.000 voluntarios.
Con los conocimientos adquiridos ahí desarrollaron un test que emplearon con dos grupos de gemelos que proporcionaron los resultados finales del estudio.
"Hicimos que un conjunto de gemelos idénticos y otro de no idénticos otorgara una puntuación del 1 al 7 a 200 caras y comprobamos el grado de coincidencia entre las respuestas de cada participante del estudio y la puntuación media obtenida por cada rostro", comenta Laura Germine, investigadora de psiquiatría y neurodesarrollo de la Universidad de Harvard y autora del trabajo.
"Esto permitió medir la idiosincrasia, la individualidad y la extravagancia de las respuestas ofrecidas", comenta la experta.
El estudio enfatiza que los entornos que son importantes para esta configuración de la belleza no son los que comparten los miembros de una misma familia, sino otros más sutiles e individuales, que incluyen las experiencias personales con amigos y compañeros, así como imágenes e información recibida en los medios de comunicación.
Los expertos de Harvard subrayan que no se trata de la escuela a la que se asiste, la cantidad de dinero que posee la familia o quién vive al lado.
“La belleza percibida en un rostro tiene mucho más que ver con experiencias personales: los rostros que ve en la televisión y las revistas, las interacciones sociales que tienen lugar todos los días de la vida de una persona, e incluso la cara de la primera pareja son las influencias que más marcan esta visión”, dice Germine.
Es decir, se encuentran atractivas a personas cuyos rasgos faciales se asemejan a la cara de alguien que importa o con quien se pasa mucho tiempo, como una pareja o el círculo de amigos más cercano.
Para los científicos, el hallazgo proporciona una nueva ventana a la evolución y la arquitectura del cerebro social.
Explican que futuros trabajos deberán profundizar en los aspectos del entorno más relevantes en la formación de estas inclinaciones e investigar de dónde proviene el gusto o atractivo estético frente al arte, la música o los animales domésticos.