La apuesta de la nación asiática es que vacunarse contra la gripe estacional este año aumentaría las posibilidades de éxito de una vacuna contra el COVID-19 el 2021. Pero el caso de 13 fallecidos ha asustado a la ciudadanía.
Corea del Sur buscó este lunes disipar las preocupaciones sobre la seguridad de su vacuna contra la influenza estacional, instándola a los ciudadanos en un intento por evitar el estrés en un sistema de salud que ya está lidiando con el coronavirus.
La ansiedad pública sobre la seguridad de la vacuna contra la gripe ha aumentado después de que al menos 59 personas murieron este mes después de las vacunas, mientras que el mes pasado tuvieron que desecharse alrededor de 5 millones de dosis, porque no se almacenaron a las temperaturas recomendadas.
Las autoridades han dicho que no encontraron un vínculo directo entre las muertes y las vacunas contra esta gripe, que mata al menos a 3.000 surcoreanos cada año.
"Confíen en las conclusiones de las autoridades de salud ... (han sido) alcanzadas después de una revisión con expertos", dijo el presidente Moon Jae-in.
“Existe la necesidad de expandir la vacunación contra la influenza este año no solo para prevenir la influenza, sino también para prevenir la infección concurrente y la propagación de la influenza y COVID-19”, dijo en una reunión el primer mandatario.
El año pasado, más de 1.500 personas mayores murieron dentro de los siete días posteriores a recibir las vacunas contra la gripe estacional, pero esas muertes no estaban relacionadas con las vacunas, aseguró el gobierno.
Corea del Sur, que comenzó las vacunas gratuitas para el último grupo elegible el lunes, ordenó un 20% más de vacunas contra la gripe este año para desterrar la posibilidad de grandes brotes simultáneos de gripe y coronavirus en invierno, lo que afectaría su sistema de salud.
Dijo que más de 14,7 millones de personas ya han sido vacunadas.
Se han reportado alrededor de 1.200 casos de reacciones adversas entre ellos, pero no se ha establecido un vínculo directo con las vacunas, aunque aún se están investigando las 13 muertes que se consideran más sospechosas.
De todos modos, los beneficios de la vacunación superan con creces cualquier efecto secundario, dijo el Ministerio de Salud.
Las reacciones adversas graves a las vacunas contra la gripe son raras, y solo una de cada 500.000 o un millón de personas sufre un shock anafiláctico, una afección potencialmente mortal que generalmente se presenta en segundos o minutos tras la inoculación en aquellas personas con alergia, dijo un alto funcionario de salud en la sesión informativa del lunes.
No se ha informado de tal caso, dijo el gobierno.
De todos modos, el miedo se ha instalado: la ciudad-estado de Singapur se convirtió esta semana en una de las primeras naciones en suspender temporalmente el uso de dos vacunas contra la influenza, como medida de precaución, a pesar de que no hay informes de muertes que pudieran estar relacionadas.
El gobienro de Corea del Sur dijo que las infecciones por influenza se redujeron a 1.2 por cada 1.000 personas en la semana del 11 al 17 de octubre, desde 4.6 en la semana correspondiente hace un año.