El Índice de Gerentes de Compra (PMI) del sector manufacturero elaborado por Caixin/Markit bajó a 50,8 en noviembre.
La actividad del sector manufacturero de China creció en noviembre a su menor ritmo en cinco meses, debido a que los costos de los insumos permanecieron altos y las duras medidas del Gobierno contra la contaminación presionaron a la confianza de las empresas, mostró el viernes un sondeo privado.
El Índice de Gerentes de Compra (PMI) del sector manufacturero elaborado por Caixin/Markit bajó a 50,8 en noviembre desde 51,0 en octubre, pero estuvo casi en línea con las expectativas de analistas de una lectura de 50,9.
Si bien el índice permaneció sobre el umbral de 50 puntos que separa la expansión de la contracción en la actividad según una base de comparación mensual, fue la cifra más débil desde junio y apuntó a una mejoría apenas marginal de las condiciones de operación.
La producción y las nuevas órdenes crecieron sólo modestamente, mientras que los costos de los insumos siguieron aumentando con fuerza, lo que presionó los márgenes de ganancias. Las empresas pudieron traspasar una mayor parte de las alzas de precios a sus clientes, pero debieron despedir personal a su mayor ritmo en tres meses para reducir gastos.
El optimismo sobre el panorama para los negocios en un año se enfrió por tercer mes consecutivo y algunas empresas dijeron que esperan que las políticas medioambientales más estrictas y una demanda relativamente débil presionen al crecimiento. La cifra de la confianza fue una de las más débiles desde comienzos del 2012.
Algunas provincias del norte del país han ordenado a las fábricas que disminuyan o detengan la producción para reducir el espeso esmog invernal, pero los límites a la producción han generado temores de escasez de suministros, lo que ha elevado aún más los precios de bienes terminados como el acero y el cobre.
Las cifras del reporte de Caixin contrastan con un sondeo oficial publicado el jueves, que mostró un inesperado repunte de la actividad manufacturera el mes pasado a pesar de que se anticipaba que sería lastrada por las medidas contra la contaminación del aire y el enfriamiento del mercado inmobiliario.
La versión de Caixin tiende a concentrarse más en las pequeñas y medianas empresas.