Agrupaciones de médicos aseguran que los recintos no están preparados para recibir a los turistas que llegarán con el evento deportivo.
Xinhua. Los dos principales colectivos de médicos de Río de Janeiro alertaron que los hospitales públicos de la ciudad están completamente "abarrotados" y que ello dificultará a hacer frente a un posible aumento de pacientes durante los Juegos Olímpicos, que se celebrarán entre el 5 y el 21 de agosto.
En una rueda de prensa, el sindicato de médicos de Río de Janeiro y el Consejo Regional de Medicina (CREMERJ), criticaron la situación en la que se encuentran los diez hospitales públicos de la ciudad que deben atender a los turistas que lleguen para los Juegos Olímpicos, tras visitar las instalaciones de todos ellos.
Los médicos denunciaron que hay pacientes en camillas en los pasillos, falta de personal médico y en algunos casos, no hay medicamentos o de bolsas de sangre.
"Todos los hospitales están abarrotados. Si les preguntas qué harían si llegan de repente 30 pacientes, te dicen que no tienen dónde colocarlos", explicó el vicepresidente del CREMERJ, Nelson Nahon, quien puso como ejemplo que el centro médico más cercano al Parque Olímpico, el Lourenco Jorge, tiene capacidad para atender a 46 pacientes en la sala de emergencias y durante una visita del CREMERJ había 70 internados, varios de ellos en los pasillos.
La entidad calculó que hay un déficit de entre 150 a 200 camas por día en unidades de tratamiento intensivo en los hospitales públicos de la ciudad.
Otra crítica realizada fue la falta de tiempo para el entrenamiento del personal sanitario contratado como refuerzo durante los Juegos Olímpicos, puesto que las prácticas empezarán apenas cinco días antes del inicio de los juegos, tiempo que consideran insuficiente para recibir entrenamiento de casos más complejos, como sería la atención a víctimas múltiples.