Por años, Estados Unidos y el Reino Unido lideraron la lista de favoritos pero hoy los estudiantes prefieren países menos convencionales.
Si elegir qué posgrado cursar es una decisión difícil, porque cada vez las propuestas del mercado son más y mejores, seleccionar el destino para hacerlo lo es aún más. Con mayor frecuencia los colombianos están prefiriendo salir del país para prepararse académicamente en busca de mejores oportunidades laborales, mejor calidad de vida, experiencia de multiculturalidad, la calidad de los profesores e investigadores y los altos niveles de recursos físicos que les brindan las universidades del extranjero.
En juego no sólo está el futuro profesional, sino los recursos invertidos, el aprendizaje de retorno y las redes de contacto. Teniendo en cuenta eso, Luis Fernando Correa, gerente de operaciones e innovación de Universia, les recomienda a quienes estén pensando en estudiar en el exterior: “El punto de partida debe ser plantear muy bien cuáles son sus propósitos personales. Responder preguntas como: ¿para qué quiero hacer un posgrado? ¿En qué áreas del conocimiento quiero especializarme? ¿Con qué recursos cuento (no sólo económicos, sino de manejo de otro idioma y habilidades personales que me faciliten la vida temporalmente en otro país)?”.
Una vez resueltas estas dudas, el siguiente paso es explorar las opciones de universidades en las que existe una oferta académica relacionada con los intereses y las posibilidades personales. También es importante revisar las condiciones que tienen los diferentes países como destino de estudios. Por ejemplo, el costo de vida y académico, las restricciones y oportunidades de trabajar mientras se estudia, las condiciones específicas que exigen para otorgar visa de estudiantes, entre otras cosas.
De acuerdo con Johanna Torres, directora del Programa de Consejería Académica y Relaciones Internacionales de Colfuturo, Estados Unidos y el Reino Unido han sido por años los países líderes en la elección de los colombianos, aunque desde hace cuatro años han empezado a aparecer en la lista Holanda, Alemania y Australia, y desde hace menos tiempo destinos poco convencionales como Ucrania, Corea y Hungría. “Esto se debe a varias razones. Primera, a que los estudiantes buscan otro conocimiento, los países se empiezan a vender más y ofrecen ventajas en costos y en la red europea que les permite viajar fácilmente”, detalla.
Sin embargo, según Correa, España es el principal destino para posgrados, debido a la facilidad del idioma y a la diversidad de instituciones y oferta académica. Pero hay otros de habla hispana, como Argentina y México, que también son considerados por los estudiantes. En el caso de países que hablan otras lenguas, Australia y Brasil lideran la lista por el inglés y el portugués, respectivamente.
Información que respalda Pablo Martín González, director del Servicio Español para la Internacionalización de la Educación (SEPIE), al revelar que en 2017 alrededor de 5.000 estudiantes colombianos fueron a España a estudiar posgrados y doctorados, y por estancias de investigación posdoctorales. El incremento fue del 9% con respecto a las cifras de 2016.
“Creo que la principal característica que llama la atención de los colombianos es que vienen a formarse en universidades de excelencia, al tiempo que aprovechan la calidad de vida a un costo muy asequible y gozan de un país muy seguro. Otro aspecto que valoran es el patrimonio cultural y la belleza natural. Somos el segundo país con más turistas del mundo y tenemos una comunidad de emigrantes colombianos que favorece la familiaridad y relación entre nuestros países”.
Por supuesto que estudiar en el exterior tiene unos costos más altos que prepararse en Colombia, “depende del país, la ciudad y la carrera que elijan”, sustenta la vocera de Colfuturo. No obstante, año tras año ha habido un crecimiento significativo en el número de personas que prefieren salir del país.
“Esto no necesariamente tiene que ver con temas de calidad, puesto que en Colombia hay universidades que ofrecen formación con elevados niveles de profesionalismo. En muchos casos está relacionado con que la gente ve un valor añadido al hecho de poder tener una experiencia de conocimiento y contacto con otra cultura”, concluye Luis Fernando Correa.
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