A unos cuantos kilómetros de Río de Janeiro se encuentran destinos increíbles para los amantes de la playa y el sol.
La celebración internacional deportiva los Juegos Olímpicos está próxima a llegar a Río de Janeiro y cada vez son más los visitantes que arribarán a la calurosa ciudad para ser parte de este gran evento y disfrutar de los diversos destinos que ofrece la ciudad carioca.
La región conocida como Costa del Sol es el lugar ideal e imperdible para los turistas que buscan disfrutar de la playa en medio de atractivos y actividades recreativas frente al mar.
Ubicada en el Estado del Rio Janeiro, se puede visitar la Costa del Sol desde la capital en auto o bus. A continuación, los principales recorridos y las opciones que incluye esta calurosa ruta.
Buzios
Es el destino más visitado, ya que representa una parada obligatoria en Río, atrayendo turistas en busca de playas y vida nocturna. Se trata de un lugar sofisticado, con sólo 24 mil habitantes, ubicado a 165 km de la capital en medio de una increíble naturaleza, que cuenta con deslumbrantes senderos para quienes les guste caminar.
Dentro de los principales atractivos turísticos de Buzios, se encuentran sus 23 playas con opciones de paseos marítimos. Para quienes buscan bucear, las playas Tartaruga, Azeda y Azedinha son la mejor opción; mientras que para quienes prefieren practicar deportes como surf o windsurf las playas Brava y Geribá, serán la alternativa propicia para un mar más agitado.
Entre otras opciones de balnearios están Olho de Boi, un paraíso para los naturistas; además de espacios con piscinas naturales dentro de las playas do Forno, da Foca, dos Amores, Poças das Tartarugas y da Tartaruga. Finalmente, otro imperdible es la playa dos Ossos, la ensenada donde se encuentran algunas de las construcciones más antiguas de Buzios, como la Igreja de Sant'Anna.
Rua das Pedras es el principal punto de encuentro, donde tiendas de reconocidas marcas comparten con las de artesanía local, restaurantes internacionales, comida típica, bares con música en vivo y exposiciones de arte.
Cabo Frío
A dos horas de Río de Janeiro, se encuentra Cabo Frío, una ciudad con potencial turístico que crece cada día debido a su organización, limpieza y naturaleza privilegiada. Es famosa por sus playas oceánicas y sus dunas de arena blanca, además de sus atractivos de día y noche como restaurantes y bares.
Cuenta con cómodos hoteles y posadas. Su fácil acceso por vía terrestre, aire y mar, hace de la ciudad un punto fuerte de la región de la Costa del Sol, además de un destino importante en la escena nacional e internacional.
Sus monumentos culturales son otro gran atractivo del lugar; algunos ejemplos son: el Forte São Mateus, una construcción de piedra con arquitectura de líneas rectas que es parte del patrimonio nacional; la Casa Scliar con un monumento en homenaje al pintor brasilero Carlos Scliar; el convento de N.Sª dos Anjos, uno de los ejemplos más significativos de la arquitectura colonial en Brasil y la Fazenda Campos Novos, un conjunto arquitectónico de finales del siglo XVII, compuesta de la Casa Grande, la iglesia de San Ignacio y el cementerio.
Si de playas se trata, ofrece Playa do Forte, la más conocida del lugar y caracterizada por la arena blanca; además de Peró, ideal para los aficionados a la pesca al encontrar especies como anchoas, salmón y pescadilla; Praia Brava, donde el surf y bodyboard son los protagonistas y Foguete, una playa poco concurrida ideal para quienes buscan un espacio de tranquilidad.
Río Das Ostras
Un lugar de naturaleza exuberante y llena de historia que conquista a visitantes de todo el país. Sus 15 playas encantan debido a la preservación del medio ambiente y su infraestructura.
Aquí los visitantes podrán encontrar aguas tranquilas e ideales para quienes buscan relajarse, así como playas perfectas para el surf, una alternativa para quienes opten por emociones extremas.
Como principales atractivos, el lugar presenta la esencia de la cultura de los pueblos antiguos. Podemos encontrar sitios clave como el Parque cultural municipal Dos Passaros, donde se pueden observar aves y otras especies con vegetación característica; la praça da baleia, que abriga una escultura de una ballena jorobada con placas de bronce y latón; Pier de Costazul, un muelle que permite observar un hermoso paisaje para la salida de sol; el monumento dos costoes rocosos, el sitio arqueológico Sambaqui Da Tarioba y el Pozo de Piedras.
Arraial Do Cabo
La capital del buceo en Río de Janeiro ofrece programas en este deporte para familias y parejas que quieran disfrutar de óptimas playas y degustar de platos realizados en base a frutos de mar.
Cuenta con más de cincuenta puntos de buceo que requieren pequeños desplazamientos en barco de menos de 15 minutos. Cada experiencia de buceo revela tortugas, estrellas de mar, caballos marinos, corales y hermosos peces coloridos.
Para tener una idea general de las playas de Arrial do Cabo, lo ideal es hacer un paseo en barco con paradas en la Ilha do Farol y nas Prainhas, en donde además se podrá hacer sandboard en la arena blanca, teniendo una experiencia distinta y fuera del mar.