La experiencia pedagógica de Radio Sutatenza fue llevada a los nuevos formatos digitales para capacitar a más de 18 mil campesinos en diversas áreas del conocimiento.
Allí donde el mar se une con el cielo. En ese mismo lugar donde cada año llegan las ballenas jorobadas a tener sus ballenatos, viven personas con ganas de salir adelante y muy emprendedoras, ese es el caso de Hortensio Palacios, quien maneja la emisora comunitaria Riscal Stereo en la frecuencia 105.8FM, en Nuquí (Chocó), una zona de Colombia que se encuentra escondida entre las montañas y un espeso bosque.
Hasta este lugar llegaron las Escuelas Digitales Campesinas, programa socioeducativo de Acción Cultural Popular (ACPO), organización que estuvo a cargo de la creación de Radio Sutatenza y que por el impacto que tuvo en la educación del país, quedó incluido en el Registro Regional de Memoria del Mundo de la Unesco.
Por medio del perifoneó en el casco urbano de Nuquí, los habitantes conocieron los cursos que ofrece la organización. “Conocí el programa porque también hago perifoneo, acción que me permite llegar a todo el pueblo. Haciendo eso, entendí los beneficios, además, es totalmente gratis. Me inscribí e invité a mis vecinos, amigos y conocidos”, recordó Hortensio Palacios.
ACPO capacita a los campesinos en asociación y emprendimiento, liderazgo en la comunidad rural, alfabetización digital, medio ambiente y sociedad, huerta casera, paz y convivencia, pesca responsable,derechos humanos en la comunidad rural, comunicación y periodismo rural. Este curso tiene dos módulos, en el primero dan las bases de cómo hacer periodismo rural y en la segunda parte les enseñan a usar diversas herramientas para fortalecer sus habilidades.
También, está la capacitación en Conocimiento del Medio Ambiente donde le explican a cada estudiante cómo funciona el lugar donde vive, por ejemplo: los aspectos físico-espaciales, económicos, sociales y políticos para que entienda su entorno y cómo explotar eso a favor de su negocio o proyecto de emprendimiento.
Otros cursos a los que pueden acceder los estudiantes son: liderazgo y adaptación al cambio climático, organizado en dos partes. En una les enseñan las causas del cambio climático y el en otro como contribuir para disminuir esos impactos.
Hortensio Palacios ha cursado casi todos, en este momento dedica sus día al de adaptación al cambio climático, en las clases le enseñan cómo acoplar a las transformaciones que se están dando en la tierra debido a la contaminación. Durante el tiempo que Hortensio Palacios ha estudiado aprendió a usar el correo electrónico, programas como Excel, Word, Paint, además de cómo dirigirse a su comunidad para ayudar a que su región tenga un buen desarrollo, entre otras habilidades y conocimientos.
A estas ofertas educativas tienen acceso los habitantes de Nuquí, Chocó, quienes disponen de un aula de clases con computadores en la escuela central del casco urbano de este municipio. “Ese programa ha sido una biblioteca para aprender sobre las nuevas tecnologías y el uso del internet. Es una gran oportunidad”, afirmó Palacios, quien hace parte de este proyecto desde 2015.
Las Escuelas Digitales Campesinas comenzaron a funcionar desde el año 2013 por medio de capacitaciones en línea, a través de internet, y dispositivos móviles. Para las zonas rurales donde no llega la señal de internet se trasmiten los planes educativos por medio de emisoras comunitarias y también entregan memorias usb a los alumnos con los materiales del curso. Este dispositivo no requiere de internet y puede ser visualizado en computadores que no tengan ese acceso o en un dvd, que tenga está entrada y, así poder verlos en un televisor.
Los beneficiarios también cuentan con cartillas y con la ayuda de un auxiliar. “En nuestro programa los campesinos no están solitos, si no que nosotros tenemos un equipo de auxiliares y líderes campesinos que los ayudan y los apoyan para que todos puedan ir superando cada uno de los cursos y sobretodo las dificultades que se van encontrando a medida que avanzan”, explicó Kenny Lavacude, director de ACPO.
Este proyecto de Acción Cultural Popular llega a ocho departamentos del país (Antioquia, Boyacá, Caquetá, Cauca, Chocó, Cundinamarca, La Guajira y Valle del Cauca). Con este programa se benefician más de 18 mil campesinos. De los cuales el 60% son mujeres y el 40%, hombres y desde su creación ha capacitado a 22 mil 736 campesinos.
Cuando llegaron las clases a Nuquí, Chocó, muchos ciudadanos les tenían miedo a las herramientas digitales como los computadores y el uso de internet, así lo relató Hortensio Palacios, quien no solo es un estudiante, también hace parte del grupo de líderes campesinos de su región, por lo que se ha tomado la tarea de ir de corregimiento en corregimiento a invitar a sus vecinos para que amplíen sus conocimientos.
En esta zona del país la barrera es marítima, ya que las poblaciones están separadas por el mar. Pese a ese obstáculo muchos habitantes se han esforzado para asistir a sus clases, cabe destacar que no solo los adultos son los beneficiarios, los niños y jóvenes, que quieran capacitarse también pueden acceder.
“Las escuelas digitales campesinas son una puesta de ACPO, que en el pasado trabajaba con la radio porque era la tecnología que tenía a la mano. Lamentablemente la vida va cambiando y la radio dejó de ser un vehículo privilegiado para la educación para convertirse en un medio de entretenimiento, recreación e información y junto a ese cambio de la radio están las nuevas tecnologías de la información y las telecomunicaciones”, dijo Lavacude.
Las capacitaciones constan de cuatro unidades. Para ir avanzando los alumnos tienen que presentar una evaluación de todo lo visto en cada módulo. El puntaje para aprobar debe ser el 75%. En caso de que saque un porcentaje menor pueden presentar el examen cuantas veces sea necesario hasta obtener lo requerido. Para la certificación los estudiantes presentan una prueba final.
Este proyecto no nació de la nada. Para su creación se realizaron varias discusiones con líderes campesinos y auxiliares, quienes hicieron parte y se beneficiaron con los programas de alfabetización de Radio Sutatenza.
“Hicimos grupos focales con personas que habían participado en lasescuelas radiofónicas y personas que no habían participado nunca y les preguntamos cómo debía ser la acción popular del siglo XXI y todos contestaron que necesariamente tenía ser enfocado al acceso a las tecnologías de la información”, recordó Lavacude.
Dentro del programa de educación se encuentra la red de reporteros rurales, quienes crean contenidos para el periódico El Campesino, fundado en 1958. Algunos de los beneficiados ahora hacen parte de las Escuelas Campesinas como auxiliares. “Me preparé de como facilitador de las Escuelas Digitales. Estoy aplicando las ideas que quedaron plasmados en mi desde las clases de Radio Sutatenza”, aseguró Alberto Celis.
Este programa es una opción de educación para las personas del campo, quienes no tienen la posibilidad de acceder fácilmente a la academia y a las nuevas tecnologías. En conmemoración de los 70 años de ACPO se inauguró el pasado 25 de mayo la exposición “Radio Sutatenza: Una revolución cultural en el campo colombiano (1947-1994)” en la biblioteca Luis Ángel Arango, en Bogotá.
Además, realizaron la tercera edición de "MilAgro”, el 30 de mayo en Bogotá. En el evento en el que buscaba recaudar de fondos para las Escuelas Digitales.
Tanto Hortensio Palacios como los pobladores de Nuquí, esperan que lleguen más instituciones, que les ofrezcan la posibilidad de educarse, así como ellos están muchas poblaciones del país que por su ubicación geográfica no tienen fácil acceso a las nuevas tecnologías desean estar a la vanguardia y acceder a las nuevas formas de comunicación.
FOTO: PEXELS.COM