El gobierno central, que incluye a los ministerios federales, la seguridad social y el banco central, registró un déficit de 31.784 millones de reales (US$8.500 millones) antes de pagos de intereses.
Brasilia.- El gobierno de Brasil tuvo un déficit fiscal en diciembre que casi se duplicó respecto al del mes previo, lo que subraya el desafío que enfrenta el presidente Jair Bolsonaro en su búsqueda de equilibrar el presupuesto federal.
El gobierno central, que incluye a los ministerios federales, la seguridad social y el banco central, registró un déficit de 31.784 millones de reales (US$8.500 millones) antes de pagos de intereses, casi el doble que los 16.206 millones de reales (US$4.300 millones) de noviembre.
El déficit primario general del gobierno en 2018 se redujo un 3,2% a 120.300 millones de reales frente a los 124.300 millones de reales (US$31.919 millones) del año anterior, una leve mejora al 1,7% del Producto Interno Bruto desde el 1,8%.
Eso estuvo muy por debajo del objetivo del gobierno de un déficit de 159.000 millones de reales (US$42.188 millones de reales), pero fue el quinto déficit primario anual consecutivo, la peor racha de la historia.
Una vez más, la seguridad social fue el mayor contribuyente por mucho margen.
"Todos los analistas lo dicen, y todos los estudios lo muestran: si Brasil no reforma la seguridad social, el ajuste fiscal en este país será imposible", dijo a periodistas el secretario del Tesoro, Mansueto Almeida.
En general, los ingresos netos del gobierno el año pasado aumentaron un 7,3%, o un 2,6% en términos reales, a 1,23 billones de reales, mientras que los gastos subieron un 5,7%, o un 2,0% en términos reales, a 1,35 billones de reales, dijo el Tesoro.