Por Ruth Rodríguez, para Excélsior.
Con el nuevo Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá (ahora T-MEC) será más complicado que en el país se puedan producir medicamentos biocomparables, iguales a los biotecnológicos innovadores con patente, que sirvan para atender enfermedades como el cáncer y el VIH-Sida, así como algunas vacunas bioequivalentes, que son más baratas por ser genéricos.
Con el T-MEC, un medicamento innovador puede alargar su protección de 30 a 50 años, lo que golpea a la industria nacional, porque los laboratorios transnacionales utilizan artimañas para alargar la patente de sus medicamentos.
La industria farmacéutica nacional está preocupada porque esto podría retrasar la entrada de medicamentos biocomparables al mercado, lo que perjudicaría a los empresarios mexicanos y a las personas de menores ingresos. Con ello, las empresas de genéricos deberán invertir en sus propios estudios clínicos o esperar el vencimiento del periodo de protección de datos para poder solicitar su registro de comercialización de bio comparables o biosimilares ante la Cofepris.
El tema preocupa a los dueños de laboratorios nacionales, tanto que hace unas semanas se reunieron con el secretario de Salud, Jorge Alcocer Varela, para proponerle que en la Cámara de Senadores se analice su caso y se matice la implementación para que quede a cinco años y no a 10, como se plantea en el T-MEC. Con ello, aseguran, la industria nacional podría acceder más rápidamente a estos datos clínicos que realizan los grandes laboratorios transnacionales y podría producir biocomparables de calidad, eficaces y a buen costo, así como ayudar a la investigación farmacéutica nacional y generar más inversiones.
Porque para la Asociación Mexicana de Laboratorios Farmacéuticos (Amelaf), que encabeza Juan de Villafranca, y que integra 27 laboratorios nacionales, con 100 por ciento de capital mexicano, actualmente las transnacionales se llevan sus inversiones a sus países de origen. Claro que ésta es la visión del sector nacional.
Para la Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica (AMIIF), que agrupa a las 40 mayores farmacéuticas de México, el acuerdo y la protección de datos clínicos no lastiman o retrasan la producción de genéricos, y por el contrario, representan la oportunidad de garantizar reglas claras y certeza jurídica para inversiones en investigación en el país y abonan al desarrollo económico. Usted saque sus propias conclusiones.
Abatelenguas
Como buen político, Germán Martínez Cázares, en su primer evento como titular del IMSS, se comprometió a combatir la corrupción que, dijo, impera en el Instituto. Pero no quiso comprometerse a decir si sancionará a los responsables de la misma o les aplicará el perdón presidencial. Eso sí, a los que de antemano amenazó con no perdonar y sancionar con todo el rigor fue a “quienes deben cuotas obrero-patronales”. Mmm. ¿Será que ahora sí los empresarios se tendrán que poner al corriente con el pago de sus cuotas que antes les perdonaban o que evadían?
Bajo el microscopio
Les adelanto que el equipo más cercano del secretario de Salud, Jorge Alcocer, quedará integrado así: Hugo López-Gatell, quien fuera director general adjunto de Epidemiología de la SSa del 2008 al 2012, ocupará la subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud. Asa Cristina Laurell, investigadora, médica y exsecretaria de Salud del Distrito Federal con López Obrador, fue asignada a la subsecretaría de Integración y Desarrollo del Sector Salud. En la Cofepris, fue designado el pediatra yucateco José Alonso Novelo Baeza. Y en el Seguro Popular, de manera momentánea, pues será reestructurado y fusionado con la Ssa, estará Ivonne Cisneros, investigadora de la Universidad Veracruzana.