El realizador aseguró que es “infinitamente transparente” en relación con los señalamientos por semejanzas de su exitosa cinta con un corto holandés.
Guillermo del Toro ha vivido algunos de los mejores momentos de su carrera gracias a su cinta "La forma del agua", pero también algunos de los episodios más agridulces como las comparaciones temáticas y estéticas en redes sociales con el corto holandés The Space Between Us, realizado en 2015 por Marc S. Nollkaemper.
"Estoy muy tranquilo. Lo curioso para mí es que es un asunto que ya se discutió el año pasado, ya lo contestamos y que vuelve a salir ahora... Tengo 25 años de carrera y soy infinitamente transparente, y de hecho celebro las influencias que tengo y cómo se transforman cuando las aplico a mi cine, pero este no es el caso”, señaló Del Toro en entrevista exclusiva vía telefónica, en la que recordó que la polémica surgió a mediados de 2017 en Estados Unidos", indicó.
En la charla, el ganador del León de Oro en la Mostra de Venecia remarcó su obsesión “desde la infancia” con El monstruo de la laguna negra (Jack Arnold, 1954) y detalló las fechas en las que adquirió la idea de Daniel Kraus (con quien coescribió el libro Trollhunters) y posteriormente la vendió a los estudios 20th Century Fox.
"Hay un calendario rigurosamente contractual, con contratos y correos electrónicos que empiezan cuando la historia la compro de un escritor que se llama Daniel Kraus, en diciembre de 2011. La historia y los diseños se trabajaron de 2012 a 2014 para buscar financiamiento y básicamente se presentaron en la forma en que está la película, desde 2014", agregó.
Según complementó, "las fechas, los calendarios, los contratos no son discutibles. La opinión de las coincidencias puede ser la que tu quieras, pero la premisa que se compra en el 2011 (por Fox) es: ‘Una mujer que hace el aseo en un laboratorio súper secreto del gobierno se encuentra con una criatura anfibia humanoide y le ayuda a escapar y se la lleva a casa. Esa es la que compré abiertamente a Daniel Kraus en diciembre de 2011- enero de 2012. Está completamente documentado, entonces para mí ahí acaba la polémica”.
El cineasta recordó que muchos de los elementos de su Hombre Anfibio que protagoniza La forma del agua junto a Elisa, la mujer muda del aseo que lo rescata del laboratorio, aparecieron en el personaje de Abe Sapien, en la adaptación que realizó de Hellboy en 2004 y su secuela de 2008.
"El manejo de estas imágenes, de estos motivos y estos personajes no son de ahorita, son personajes que significan mucho para mí. Llevo obsesionado desde la infancia con la criatura del lago negro, y lo digo abiertamente. Aparte de que exista la versión animada y de acción viva de Abe Sapiens que hicimos, existen 25 años de ocuparme de este género de esta manera y creo que todos le debemos mucho a El monstruo de la laguna negra, a la escuela, etc. Es tan sencillo como eso”, agregó.
Según reconocio, "se empezó a hablar de él (el corto) a mediados del año pasado, pasando el verano. Si tu buscas, hay un link donde yo contesto esas preguntas puntualmente" y que con los creadores "hemos tenido contacto, y ha sido muy cordial, muy abierto, muy tranquilo".
Finalmente, el cineasta que el próximo martes conocerá la cantidad exacta de nominaciones al Oscar que consiga su cinta, prefirió no sospechar ante la posibilidad de que su historia se haya filtrado de alguna forma al equipo creativo de The Space Between US.
"En mi experiencia, frecuentemente las ideas pasan en rachas de dos o tres muy parecidas. Me acuerdo que cuando estaba haciendo El espinazo del diablo, (Alejandro) Amenábar estaba realizando Los otros; cuando estaba haciendo Cronos, Coppola estaba filmando Drácula”, reflexionó.
"No estamos inventando el hilo negro, lo que haces con esa anécdota es lo interesante. No quiero yo pensar mal de nadie. Creo que son coincidencias anecdóticas de una historia bastante asequible, o sea alguien que libera a una criatura de un lugar de experimentación, bla bla bla. Digo, no voy a pensar mal de nadie”, finalizó.