Quienes practican natación y ejercicio aeróbico también registran efectos similares, aunque en menor magnitud.
Los deportes con raqueta, la natación y el ejercicio aeróbico podrían estar asociados con una reducción en el riesgo de morir por enfermedad cardiaca y embolias, indicó un estudio de la Universidad de Oxford.
La investigación, realizada por un equipo internacional, se basa en datos obtenidos de 11 sondeos de salud anuales en Inglaterra y Escocia realizados entre 1994 y 2008.
Los sondeos incluyeron a 80.306 adultos con una edad promedio de 52 años. Los participantes fueron interrogados sobre sus actividades físicas.
El términos del riesgo de morir por enfermedad cardiaca y embolia, el equipo encontró que practicar deportes de raqueta como el bádminton, el tenis y el squash estuvo asociado con un riesgo 56 por ciento menor. La natación registró 41 por ciento y el ejercicio aeróbico registró 36 por ciento, en comparación con las personas que no participaron en estos deportes, señaló el estudio.
En cuanto al riesgo de morir por cualquier otra causa, quienes practicaron deportes de raqueta tuvieron una reducción de riesgo de 47 por ciento. La reducción del riesgo de los nadadores fue de 28 por ciento y de quienes practicaron ejercicio aeróbico fue de 27 por ciento.
Estos hallazgos indican que la participación en deportes específicos podría tener beneficios significativos para la salud pública, indicaron los investigadores.
Pero también advirtieron que esto es sólo un estudio de observación y que no pueden sacarse conclusiones firmes sobre causa y efecto.