Inspirada en Frida Kahlo y las mujeres de los años ’70, la original creadora presenta outfits pensados en amplias posibilidades de mezcla y combinación.
Reconocida por su particular estilo de plasmar la esencia de su firma y su sello personal en todas sus propuestas, Marcia Arocha ha sabido lograrse un importante y destacado lugar en la moda venezolana; y sin duda no hay que perderla de vista, pues tomando en cuenta su disciplina, buen gusto, pasión y empuje, no es de extrañar que muy pronto la veamos abriéndose caminos internacionalmente.
Un primer paso en este sentido lo dio hace algunos meses atrás cuando se trasladó a la ciudad de Miami, con la firme determinación de ir posicionando su firma en suelo extranjero; y en donde ha aprovechado la oportunidad de su estadía para vestir ocasionalmente a algunas artistas criollas para alfombras rojas y premiaciones como Georgina Palacios o Anais Vivas.
Así, colmada de toda esa inspiración que le ha brindado esta nueva etapa de su vida, Arocha tomó esas ideas y sentimientos para plasmarlos en “Magdalena Hardy”, colección en la que asegura que sus mayores musas fueron Frida Kahlo y las mujeres de los años ’70.
“Creamos una fémina imaginaria que representaría las cualidades de la mujer de la colección. Es un personaje donde fusionamos el verdadero nombre de Frida (Magdalena), con el apellido de un ícono como lo fue Francoise Hardy; e hicimos una mezcla entre lo artístico de una y lo desenfrenado de la otra.
En resumen, son dos figuras que aunque no se asemejan, en nuestra inspiración, las unificamos en una realidad paralela creando esa ‘mujer karma’, que es la que ama y sigue nuestra marca”, apunta la diseñadora.
Conformada por 15 outfits creados a partir de piezas que pueden mezclarse y combinarse, como mini faldas con vuelos, vestidos cortos, faldas lápiz ¾, vestidos a media pierna, escotes en v profundos y sensuales, crop tops y faldas largas asimétricas, entre otras piezas ready to wear; “Magdalena Hardy” fue totalmente pensada para ser llevada no sólo a un cocktail, sino también a una ocasión más elegante o de gala, pero siempre con la premisa de robar miradas y no dejar a esa ‘mujer karma’ pasar desapercibida.
“La paleta de colores que inspiraron esta colección proceden de los contrastes que quisimos crear entre Frida, a través del naranja, el verde esmeralda y el rosa claro; y esa mujer de los años 70’s, valiéndonos de los plateados, dorados y tornasoles afines con esa epoca; dándole así un toque más arriesgado", dice.
"Pero nuestro hilo conductor definitivamente fue el blanco y el negro”, cuenta la ceradora, agregando que en esta ocasión incorporará un modelo de zarcillos y un choker elaborados en bronce y bañados en oro 18k con detalles en perlas y cristales, con los que le seguirá dando fuerza a la línea de orfebrería; etapa en la que se inició desde su entrega anterior, “Metamorfosis”.
Un cierre con broche de oro exije definitivamente un buen photoshoot, y en ello Marcia Arocha también trabajó con mucho esmero, seleccionando para esta campaña un equipo de lujo conformado por el joven y talentoso Jesús Soto en la fotografía, la bellísima Ana Corina Perez como modelo y la estilista Neiza Hernandez: “Con el lookbook quisimos dar a conocer esas dos personalidades, una más rígida y otra en movimiento… más aventurera", destaca.
