Investigaciones y estudios han encontrado ciertos elementos que ayudan a mejorar la calidad de vida.
La clave para ser feliz es la eterna búsqueda de muchas personas. Es por eso, que los científicos quisieron hacer lo suyo al tratar de encontrar la fuente de la felicidad en pequeños actos cotidianos, dado que, según afirman, ésta se puede aprender y mantener, todo es cosa de técnica y práctica.
Así lo postula el doctor israelí Tal Ben-Shahar, experto en Psicología Positiva o “Ciencia de la felicidad”, como él mismo la define. “No tienes que ser perfecto para llevar una vida más rica y más feliz”, es su lema.
A continuación, ciertos hábitos que diferentes expertos y estudios aconsejan poner en práctica para mejorar la calidad de vida:
Acción
- Viajar continuamente
Viajar es una experiencia que aporta conocimientos, recuerdos y felicidad a las personas. De hecho, un estudio del Dr. Jeroen Nalwun, un profesor de la Universidad de Breda, Holanda, afirma que “las personas que viajan frecuentemente son más felices”.
De acuerdo a la investigación, planear las vacaciones provoca un grado más elevado de felicidad, dado que se están planeando y anticipando buenos momentos. Lo que sí, el estudio no mostró grandes diferencias cuando la persona volvía a su rutina, por lo que la clave es la planificación y el viaje en sí.
- Hacer deporte
Lo importante es practicar algún deporte, más allá de cuál sea o su intensidad, dado que la idea es que el cerebro secrete endorfinas, conocidas como la droga de la felicidad, las que además de causar placer ayudan a mitigar el dolor.
La práctica continua de ejercicio físico hacer sentir mejor a las personas, pues aumenta los niveles de energía y reduce los niveles de estrés.
- Meditar
Este hábito ayuda a aclarar y descansar la mente, por lo que es un gran aliado para combatir el estrés. Otorga paz y contribuye a tener pensamientos más positivos.
“A largo plazo, la práctica continuada de ejercicios de meditación contribuye a afrontar mejor los baches de la vida, superar las crisis con mayor fortaleza interior y ser más nosotros mismos bajo cualquier circunstancia”, afirma Miriam Subirana, doctora por la Universidad de Barcelona, escritora y profesora de meditación y mindfulness.
- Escuchar música
La música influye en el estado de ánimo de las personas y, si se escoge bien, aporta felicidad y paz.
Un estudio de Saarikallio y Erkkila descubrió que escuchar buena música afecta positivamente en al humor y al estado de ánimo.
PsicologíayMente revela otro estudio, esta vez de Lonsdale and North, el que concluye que escuchar música proporciona múltiples beneficios psicológicos, como manejar y controlar los estados emocionales negativos.
- Vivir cerca del trabajo
Muchas personas gastan una parte importante de su tiempo, y energía, en trasladarse a diferentes lugares, en especial, al trabajo.
Según un estudio de Yeo Valley la gente más feliz son aquellos que no tardaban más de 20 minutos en llegar a su lugar de trabajo.
- Salir a la calle, especialmente, los días de sol
Aprovechar la luminosidad y calor del sol es beneficioso para la salud, dado que es un antidepresivo natural, estimula las funciones endocrinas y aumenta la producción de serotonina, un neurotrasmisor relacionado con el estado de ánimo.
Un estudio de la Escuela de Ciencias Económicas y Políticas de Londres concluyó que pasar tiempo al aire libre para aumentar la alegría y el buen humor. Lo ideal es estar 20 minutos en la calle cuando hace buen tiempo, dado que además de aportar felicidad puede mejorar la memoria.
Mente
- Simplificar en el ocio y el trabajo
“Identifiquemos qué es lo verdaderamente importante, y concentrémonos en ello”, propone Tal Ben-Shahar. Por eso recomienda enfocarse en una cosa y dejar de intentar con muchas a la vez.
Lo mismo aconseja para el ocio, por lo que afirma que es “mejor apagar el teléfono y desconectar del trabajo esas dos o tres horas que se pasa con la familia”.
- Perdonar los fracasos e incluso celebrarlos
El doctor Ben-Shahar afirma que "es imposible tratar de vivir sin emociones negativas, ya que forman parte de la vida, y son tan naturales como la alegría, la felicidad y el bienestar. Aceptando las emociones negativas, conseguiremos abrirnos a disfrutar de la positividad y la alegría”.
Por eso, cuando las personas se equivocan deben perdonarse y recordar que son humanos.
- Vivir el presente
Enfocarse en el presente es fundamental para alcanzar la felicidad. No vale la pena enfocarse en cosas pasadas que no se pueden cambiar o fantasear con el futuro, pues esto puede crear expectativas que de no cumplirse pueden hacer infelices a las personas. Igual de infructífero es preocuparse por asuntos que aún no han ocurrido.
Según un estudio de Sciencemag, las personas que se pasan el día rumiando pierden un 47% de su tiempo.
Esto no implica que las personas no deban tener metas, pero sí ser realistas e ir paso a paso hasta conseguirlas. Una investigación de la Universidad de Wisconsin, descubrió que el trabajar por un objetivo suprime las emociones negativas, además de activar sentimientos positivos, revela PsicologíayMente.
- No dar lo bueno por hecho, sino que agradecerlo
Esto va para los detalles y las cosas más grandes, dado que la gratitud es una emoción poderosa que provoca beneficios psicológicos. "Esa manía que tenemos de pensar que las cosas vienen dadas y siempre estarán ahí tiene poco de realista", afirma Ben-Shahar.
Según Jonathan García Allen, psicólogo y entrenador personal, un estudio demostró que la práctica de la gratitud puede aumentar la felicidad en un 25%.
- Rodearse de gente positiva
El ambiente, se quiera o no, influye mucho en el grado de bienestar, por lo que estar rodeados de personas felices y positivas contagia y genera un mejor ambiente.
Una investigación de BMJ Group determinó que la felicidad de uno depende en gran parte de la felicidad de las personas con las que tiene contacto constante.
- Vivir la felicidad y dejar de buscarla
Muchas personas se pasan la vida buscando la felicidad en vez de vivirla. Esta obsesión por ser feliz puede producir poca tolerancia a la frustración si los resultados no se consiguen inmediatamente, afirma García Allen. Incluso, su búsqueda excesiva puede producir el efecto contrario.
De acuerdo a un estudio de la Universidad de Yale, mencionado en PsicologíayMente, buscar constantemente la felicidad puede generar ansiedad y angustia.