El euro se dirigía el viernes a su quinto declive semanal sucesivo frente al dólar, su primer descenso de este tipo desde 2015.
El dólar trepaba este viernes hasta un máximo de cinco meses frente a una cesta de destacadas divisas, ayudado por la debilidad del euro, mientras los inversores se mostraban inquietos por la incertidumbre política en Italia.
El índice dólar lleva cinco sesiones seguidas de alzas y se encamina a una ganancia semanal del 1,3%. Ha mejorado un 5% desde mediados de febrero, entre apuestas de inversores de que las tasas de interés en Estados Unidos tendrán que seguir subiendo para frenar la inflación.
El euro se dirigía el viernes a su quinto declive semanal sucesivo frente al dólar, su primer descenso de este tipo desde 2015. La divisa europea ha perdido cerca de siete centavos en tres semanas en medio de un fuerte avance del dólar y preocupaciones sobre el próximo gobierno italiano.
El antisistema Movimiento 5 Estrellas y la Liga ultraderechista publicaron el viernes su programa conjunto de gobierno, prometiendo un mayor gasto que probablemente pondrá a Italia en rumbo de colisión con la Unión Europea.
En las operaciones de media mañana, el euro caía a un mínimo de cinco meses de US$1,1753. Esta semana declinó casi un 1,2% frente a su par estadounidense y también acumuló pérdidas ante el franco suizo, que suele atraer capital en tiempos de incertidumbre.
"La posibilidad de un gobierno euroescéptico en Roma está afectando a la confianza del inversor (...) en este momento parece probable un mayor déficit fiscal y de emisión de bonos (en Italia)", dijo David Madden, estratega de CMC Markets.
El poderoso avance del dólar también está afectando al euro.
El viernes, el billete verde tocó un máximo de cuatro meses frente al yen y mejoraba un 0,1%, impulsado por el avance de los rendimientos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos, lo que sugiere un panorama positivo para la mayor economía mundial.
No obstante, en una nota a sus clientes, estrategas de Citibank dijeron que el avance del dólar no durará mucho.
En particular, se refirieron al déficit presupuestario de Estados Unidos, que podría superar el billón de dólares en 2019 y contribuiría a un declive del 5% en el índice dólar durante los 12 próximos meses.