Ubicado en la desértica provincia de El Loa, busca satisfacer las necesidades de las personas que trabajan en la zona y de quienes viajan a la ciudad por asunto de negocios o diversión.
El norte chileno se ha convertido con el correr de los años en un área ideal para los negocios, especialmente, para los relacionados con la minería. Por eso, los hoteles han tratado de cubrir esta área, complementándola con la de turismo de placer.
Con ese espíritu se ha instalado en la desértica Provincia de El Loa el hotel DoubleTree by Hilton Calama, el cual busca satisfacer las necesidades de las personas que trabajan en la zona y de quienes viajan a la ciudad por asuntos de negocios o diversión.
"El segmento corporativo ha ido creciendo a pesar de que hemos notado una contracción económica durante el 2015, pero este tipo de contracciones son temporales. Ahora el hombre de negocios busca otras facilidades en los hoteles y esos son los nichos que nuestra compañía ha ido desarrollando, como por ejemplo, el entregar un servicio más personalizado y ciertos detalles, como tener el servicio de wifi sin costo en todas las áreas", revela Fabiola Gutiérrez, directora de Ventas de la marca.
Por eso, el hotel, que está emplazado en una zona céntrica de la ciudad y a pocos minutos del aeropuerto, cuenta con estaciones con computadores e impresoras en el primer y sexto piso, este último dedicado especialmente a los ejecutivos, pues allí también está la opción de tomar desayuno y disfrutar de café, té o agua de libre consumo.
Además, existen diferentes áreas, bien equipadas, destinadas para conferencias y reuniones.
Los tres salones grandes - de 250 metros cuadrados cada uno- están conectados y tienen una capacidad para unas 500 personas, aproximadamente, por lo que también sirven para matrimonios o eventos culturales, como obras de teatro. En tanto, las salas más pequeñas tienen una capacidad para 30 personas, dependiendo de los requerimientos.
Habitaciones y descanso
En lo que respecta a las habitaciones, este hotel posee 148, las cuales están divididas en sus siete pisos y se categorizan en estándar single y doble, ejecutiva single y doble y una junior suite. Todas cuenta con frigobar, un termo con agua y té y café para libre consumo.
El hotel tiene un plan a tres años de remodelar todos los cuartos y otras instalaciones para dejarlas al nivel de la cadena, dado que el recinto fue comprado a fines de 2015 a otra marca que operó allí por seis años.
Los hoteles de la cadena hoy en día se están enfocandos en a brindar un servicio más cercano. "Una de las cosas que caracteriza la marca es la galleta con chips de chocolates que te entregan al momento del check-in para que este sea más cálido y el huésped se sienta bienvenido al hotel", agrega Gutiérrez.
Y como la idea es que las personas que se alojan en el recinto también puedan relajarse, DoubleTree by Hilton Calama cuenta con la única piscina temperada de la ciudad, un gimnasio abierto las 24 horas, un spa, sauna y una sala de masajes, donde se pueden realizar descontracturantes, relajantes y reiki, a cargo de una persona especializada que también es sanador espiritual.
Unidos al edificio están el Casino Sol y un boulevard donde se pueden encontrar restaurantes, bar, tiendas, salón de belleza y un bowling.
Si se trata de disfrutar de los sabores de la zona, el hotel cuenta con el restaurante Alicanto y Boro Bar, ambos enfocados en ofrecer, además de las preparaciones tradicionales, recetas en base a ingredientes y técnicas de la región. Por eso, es normal ver platos y cócteles a base de rica- rica y chañar, lo que le otorga una personalidad especial a la carta.
La chef ejecutiva, Viviana Meneses, nació en Bolivia, por lo que se ha esforzado por difundir algo de la gastronomía de su país en este menú centrado en los gustos andinos.
DoubleTree by Hilton Calama también le brinda a las personas que viajan por negocios la opción de realizar otro tipo de turismo, enfocado en conocer las bellezas de la zona.
A 98 kilómetros se encuentra el famoso destino de San Pedro de Atacama, donde el turista se puede impregnar de la magia de este pueblo y de los atractivos que están en sus alrededores, como los géiseres del Tatio, el Valle de la Luna, la Reserva nacional Los Flamencos, además de ruinas arqueológicas y otros monumentos históricos como el pucará de Quitor.
Para los que no tienen tiempo de moverse de la ciudad, Calama también tiene sus propios encantos como el mercado, la Catedral San Juan Bautista y el Museo Arqueológico y etnográfico del Loa, siendo esta otra razón que convierte a DoubleTree by Hilton Calama en una buena opción para combinar placer y negocios en medio del desierto.