Es el primer sencillo que lanza tras ganar el Grammy que tanto molestó a Kanye West.
Tal y como había anunciado por redes sociales, Beck estrenó "Dreams", el primer sencillo de su nueva producción musical.
Escrita y compuesta por Beck, en colaboración con Kurstin y Andrew Wyatt, la canción tiene el sonido con el que el músico triunfó en los años 90.
"Dreams" es el primer tema que Beck estrena después de su exitoso y galardonado álbum "Mourning Phase", ganador de múltiples premios Grammy, entre ellos mejor álbum del año.
En una entrevista el año pasado con la radio KCRW de Los Angeles, Beck señaló que su próximo álbum sería "más ruidoso", aunque añadió que no le gustaba otorgarle ningún adjetivo.
Además, el músico declaró, según consignó Consequenceofsound.net, que este trabajo "comenzó como una cosa garage rock pesado y se convirtió en mucho más de un baile, una especie de híbrido".
El compositor y multiinstrumentista estadounidense afirmó que se sintió obligado a liberar su nuevo trabajo, para que así su audiencia se fuera familiarizando con él.
El músico ha estado trabajando en este nuevo disco durante algunos años, el cual aún no tiene titulo, ni menos fecha de lanzamiento.
A cargo del arte de tapa de "Dreams" estuvo el diseñador chileno Alexander Medel, quien fue contactado por el músico californiano tras descubrir su trabajo en una galería online.
En el tiempo
Beck ha lanzado 12 álbumes de estudio, la gran mayoría de los cuales aclamados por la crítica pese a ser de estilos muy diferentes entre sí.
Primero fue conocido por su rock irónico, con un lirismo absurdo y una gama de influencias que incluían el hip-hop y músicos callejeros mexicanos de su Los Angeles natal.
Pero Beck redujo su sonido a lo esencial y se adentró en territorio emocional más oscuro con su "Sea Change" de 2002, que registró el fin de una larga relación, y "Morning Phase", del año pasado, considerada una secuela. Este tema se impuso en los Grammy a álbumes de artistas más populares como Beyonce o Sam Smith.
Su victoria incluso fue criticada por el rapero Kanye West, que indicó que los Grammy deberían premiar éxitos comerciales.
