El Departamento de Comercio dijo que la economía se expandió a un ritmo anual del 5,9%, en lugar del 5,7% reportado en la estimación avanzada del mes pasado.
Washington. La economía estadounidense creció un poco más de lo que se pensaba inicialmente en el cuarto trimestre, pero una caída sorpresivamente grande en las ventas de casas usadas del mes pasado demostró que aún hay sectores con problemas.
En su segunda lectura del crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos en el cuarto trimestre, el Departamento de Comercio dijo que la economía se expandió a un ritmo anual de 5,9%, en lugar de 5,7% reportado en la estimación avanzada del mes pasado.
Analistas consultados por Reuters esperaban que el dato no mostrara cambios frente a la estimación anterior.
Informes separados mostraron que las ventas de casas usadas cayeron con fuerza en enero, mientras que un medidor de la confianza del consumidor cayó en febrero, un mal presagio para el gasto en consumo.
"Nos quedamos con una sensación de desazón, de que la tasa de crecimiento de este año será nuevamente modesta, debido a que es difícil esperar el típico auge en vivienda y un repunte en los bienes de consumo duraderos que normalmente encabezan una recuperación", dijo Cary Leahey, economista de Decision Economics en Nueva York.
Si bien la economía repuntó con fuerza en el segundo semestre de 2009, tras sufrir su peor recesión desde la Gran Depresión, los datos hasta ahora sugieren que habría perdido velocidad a inicios de este año.
La Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR por sus siglas en inglés) dijo que las ventas cayeron 7,2% en enero, a una tasa anual de 5,05 millones de unidades, por debajo de las expectativas del mercado de 5,50 millones de unidades.
Inventarios. Un fuerte freno en el ritmo al cual las empresas liquidan sus inventarios, junto con un aumento en el gasto en equipos y software, se combinaron para impulsar el crecimiento del cuarto trimestre, dejando en un segundo plano un gasto del consumidor y una inversión residencial mediocres.
Cuando las empresas incrementan sus inventarios o reducen la tasa de liquidación, necesitan satisfacer una mayor demanda de su producción actual, lo que impulsa al PIB.
La expansión en el cuarto trimestre alcanzó el ritmo más rápido de crecimiento desde el tercer trimestre de 2003 y se compara con una expansión de 2,2% a tasa anual en el período julio-septiembre de 2009.
Excluyendo los inventarios, la economía se expandió a una tasa anual de 1,9% en los últimos tres meses del 2009, por debajo de 2,2% estimado el mes pasado, en una señal de que el crecimiento sólo está siendo impulsado parcialmente por la demanda.
Los inventarios de las empresas cayeron sólo US$16.900 millones en el cuarto trimestre, mucho menos que los US$33.500 millones calculados en el primer informe. Esta cifra aportó 3,9 puntos porcentuales al PIB del cuarto trimestre, en la mayor contribución desde igual período de 1987.
"El mejor inventario reportado (...) implica que es poco probable que podamos esperar otra contribución sustancial al crecimiento de parte de los inventarios", dijo Michael Feroli, economista de JPMorgan en Nueva York.
En los últimos tres meses del 2009, el gasto del consumidor se incrementó a una tasa del 1,7%, por debajo del 2,8% del trimestre anterior, cuando los consumidores se vieron impulsados por el programa "dinero por chatarra" para incentivar la compra de vehículos.
En los últimos tres meses del año pasado, el gasto del consumidor, que normalmente representa dos tercios de la economía, aportó 1,23 puntos porcentuales al PIB.
Debido a que la confianza del consumidor es moderada, no se espera un repunte brusco en el gasto. Esta idea se reforzó tras conocerse que el índice de confianza del consumidor de Reuters/Universidad de Michigan cayó a 73,6 este mes, desde 74,4 en enero.
El informe confirmó que el fuerte gasto en equipos y software hizo que la inversión empresarial creciera por primera vez desde el segundo trimestre del 2008, pese a una baja en el gasto en bienes raíces comerciales.
La inversión empresarial subió a un ritmo de 6,5%, más rápido que el 2,9% estimado inicialmente y recuperándose de la caída de 5,9% vista en el tercer trimestre.
Según el Departamento de Comercio, en todo el 2009 la economía se contrajo 2,4%, su mayor declive desde 1946.
Por otra parte, la actividad empresarial en la ciudad de Nueva York se expandió este mes a su mayor nivel en más de tres años.
El índice del Instituto de Gerencia y Abastecimiento (ISM por sus siglas en inglés) de Nueva York sobre condiciones actuales de negocios, ajustado estacionalmente, subió a 77,0 en febrero, el mejor nivel desde noviembre del 2006, desde 72,6 en enero. El nivel de 50 separa al crecimiento de la contracción.