Los operadores parecían decididos a mostrar más resiliencia ante un torrente de cifras negativas que fue opacado por la advertencia del FMI sobre un desplome mundial al estilo de la Gran Depresión y un declive récord en ventas minoristas en EE.UU.

Londres. Europa lideraba este jueves el repunte de las bolsas mundiales, ya que los movimientos tentativos para reabrir partes de las economías más afectadas por el coronavirus y una mejora en el precio del crudo contrarrestaban algunos datos económicos realmente sombríos.

Los operadores parecían decididos a mostrar más resiliencia ante un torrente de cifras negativas que fue opacado por la advertencia del Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre un desplome mundial al estilo de la Gran Depresión y un declive récord en ventas minoristas en Estados Unidos.

El índice paneuropeo STOXX 600 hacía caso omiso a datos minoristas británicos igualmente malos y más advertencias de países que se enfrentan a recesiones de dígitos dobles y subía un 1%.

Por su parte, los índices de Wall Street abrieron al alza pese a otro fuerte incremento de las solicitudes de subsidios por desempleo, aunque poco después el índice Dow Jones cambiaba de tendencia y bajaba.

En los mercados de divisas y bonos, tanto el euro como la deuda italiana mostraban alzas, mientras aumentaba la especulación de que el Banco Central Europeo buscará evitar más estrés en los mercados de deuda del país, donde el ratio deuda-PIB parece en camino a superar el 150% este año.

Los mercados podrían estar reaccionando con confianza al hecho de que las autoridades están empezando a permitir -aunque con resistencias- alivios a las estrictas medidas de confinamiento.

Alemania está proponiendo reabrir los colegios y algunos minoristas a partir del 4 de mayo, mientras que una veintena de estados estadounidenses que se libró de la peor parte de la pandemia del coronavirus podría empezar a reabrir sus economías para el objetivo del 1 de mayo del presidente Donald Trump.

Las empresas también están pensando en reabrir. Las automotrices germanas Volkswagen y Mercedes-Benz reactivarán su producción en algunas fábricas locales la próxima semana y en otros países en la siguiente.

No obstante, las cifras económicas son duras. Tras la previsión del FMI para este año, los mercados esperan que China reporte el viernes que el PIB del primer trimestre se contrajo por vez primera desde que hay registros, y las esperanzas de un rápido rebote se están desvaneciendo rápido.

Asia tuvo una sesión más difícil con anterioridad. El Nikkei japonés perdió un 1,3% y el índice más amplio de MSCI de acciones de Asia-Pacífico excluyendo Japón cayó casi un 1%, borrando las tempranas ganancias semanales, que lo habían llevado a un máximo de un mes.

El dólar australiano, muy sensible al riesgo, caía a un mínimo de una semana y los precios de las materias primas luchaban por avanzar frente a la expectativa de un derrumbe de la demanda.

No obstante, la situación fue mejorando en las operaciones europeas. Los futuros del Brent y del crudo WTI en Estados Unidos avanzaban por esperanzas de que el fuerte aumento de los inventarios no deje a los productores sin otra opción más que profundizar sus reducciones de bombeo.

Los índices referenciales bursátiles en Australia, Hong Kong y Shanghái también cerraron con pérdidas de entre 0,4%-1,3% y algunos mercados emergentes declinaron más.