El índice Bovespa cayó un 3,71% a 57.999 puntos, en su mayor baja porcentual diaria desde un retroceso de 4,86% el 2 de febrero.
Sao Paulo. La Bolsa de Sao Paulo sufrió el viernes su peor caída diaria en siete meses, en medio del aumento de las expectativas de un alza de tasas en Estados Unidos, la desaceleración económica en China y la tensión provocada por un nuevo ensayo nuclear de Corea del Norte.
El índice Bovespa cayó un 3,71 por ciento a 57.999 puntos, en su mayor baja porcentual diaria desde un retroceso de 4,86 por ciento el 2 de febrero. El volumen financiero de la jornada fue de 8.200 millones de reales.
En la semana, el Bovespa bajó un 2,71 por ciento, su mayor descenso semanal desde mediados de mayo.
El anuncio de una prueba nuclear de Corea del Norte y datos de inflación por debajo de lo previsto en China, que fueron interpretados como una señal de una actividad económica menos fuerte en el gigante asiático, afectaron el clima de inversión en todo el mundo.
Los mercados aumentaron las apuestas a una pronta alza de tasas de la Reserva Federal después de que el presidente de la Fed de Boston, Eric Rosengren, dijera que la entidad enfrenta riesgos si espera mucho más tiempo para subir los tipos.
Las acciones preferentes de Usiminas cayeron un 4,7 por ciento, después de que la siderúrgica anunció que su consejo de administración aprobó durante la noche los términos finales de la renegociación de deuda con acreedores brasileños y japoneses.
Los papeles de Banco de Brasil, por su parte, se desplomaron un 5,35 por ciento. El sector financiero tuvo una mala jornada, con las acciones de Bradesco hundiéndose un 5,53 por ciento y las de Itaú Unibanco cayendo un 3,79 por ciento.
En el mercado cambiario, el real bajó un 2,17 por ciento, a 3,2800 unidades por dólar la venta, para acumular una depreciación de un 2,63 por ciento frente al billete verde en la semana.